Un extraño acuerdo con la policía ha hecho que Kentavious Caldwell-Pope, jugador de la NBA, continúe entrenando y jugando por Los Angeles Lakers. Esto, mientras que cumple con una sentencia de 25 días en la cárcel. El atleta está en prisión por haber violado su libertad condicional en noviembre pasado.
Caldwell-Pope fue detenido el 29 de marzo en Auburn, Michigan, en sospecha de estar bajo los efectos de drogas y alcohol. Por esta razón, fue sentenciado a 12 meses de libertad condicional.
Sin embargo, el 13 de noviembre falló con uno de los requerimientos. Es por ello que la policía lo sentenció a 25 días encarcelado, pero con permisos para trabajar. Solo puede abandonar las instalaciones para los juegos y entrenamientos, y también para trámites de la corte.
A Caldwell-Pope no puede salir del estado, por lo que perdió las fechas en Houston y Minneapolis.
“Esto es algo legal, de un incidente que ocurrió la temporada pasada mientras que Kentavious era miembro de otro equipo de la NBA. Los Angeles Lakers acataron los términos del programa para Kentavious que fueron establecidos para él por la corte en el estado de Michigan", señala un comunicado del equipo.
Esta situación ha tenido un gran impacto en el deportista. “Ha sido muy frustrante para mí y mis compañeros, creo que les fallé… Mis entrenadores, la organización. Tengo que lidiar con esta situación legal en la que estoy involucrado", finalizó.