Al ser el jugador más habilidoso del planeta, se encuentra siempre expuesto a recibir las faltas más criminales posibles. Aunque no hay duda que la más recordada fue aquella patada que recibió en la cara en un partido ante Athletic Club. 

En el partido de la temporada 2009-10, disputado en el estadio San Mamés, el estuvo cerca de sufrir una rotura de alguno de los huesos del rostro tras chocar directamente con el botín del venezolano Fernando Amorebieta.

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"Fue un despeje en el cual se resbaló y se chocó con mi pie. De hecho en el partido no se cobró falta. Si ves la imagen parece más grave de lo que es", se excusó el flamante fichaje de Independiente en entrevista con 'Estudio Fútbol'. 

"Estas jugadas son esas que todo el mundo siempre recuerda. Si ves bien el video, te das cuenta que no es intencionado. Jamás quiso lesionarlo", agregó el exdefensor del Athletic Club.

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