La 'usina' del Madrid en peligro: la lesión de Modric desnuda la intransigencia de Zidane

El Real Madrid empieza a pagar, muy temprano, los platos rotos de las malas decisiones que tomó Zinedine Zidane en la última ventana de traspasos. El técnico francés se ha quedado prácticamente sin variantes en el mediocampo luego confirmarse la lesión de Luka Modric, quien estará de dos a tres semanas de baja por una lesión muscular en el aductor de la pierna derecha. Pero a ello hay que sumar que el Madrid dejó ir a tres centrocampistas de nivel que tranquilamente habrían podido ser recambio ahora.

Mateo Kovacic, que ya había estado cedido en el Chelsea fue vendido por 50 millones al club inglés; Marcos Llorente, ante la falta de oportunidades se fue nada menos que al Atlético de Madrid; mientras que la nula relación entre Dani Ceballos y Zidane llevó al español a fichar por el Arsenal.

Los dos primeros simplemente no eran del gusto de Zidane, mientras que con el tercero jamás pudo superar los encontrones previos. Hoy, cualquiera de los tres habría sido capaz de reemplazar a Modric o presentarse como alternativa para algunas rotaciones en el centro del campo.

Los de siempre sin descanso

Sin embargo, Zidane decidió dejarlos ir y quedarse con el 'viejo' tridente conformado por Casemiro, Kroos y Modric como titulares, con tan solo un recambio para la posición: Federico Valverde. Ahora, con la baja del croata y con la Champions League a la vuelta de la esquina, recién el comando técnico y la junta directiva del Madrid han tomado consciencia de la negligencia que cometieron al no reforzarse en la medular.

Casemiro y Kroos prácticamente no tendrán descanso en la seguidilla de partido que están al caer y las consecuencias se podrían ver sobre la recta final de la temporada. Incluso antes.

¿Y los 'galácticos'?

Zidane y Florentino Pérez se empeñaron en cerrar las operaciones por Eriksen, Pogba, Bruno Fernandes o Van de Beek, pero ninguno de ellos llegó. El club no tuvo más ojos en el mercado de fichajes que no fuera alguno de esa lista y ahora lo está empezando a lamentar.

Tan solo ha hecho falta un mes de competición de Liga para que el equipo se quede 'cojo' en el mediocampo. Y la única, o la más lógica, solución que ve venir es la de jugar con dos centrocampistas con un 4-2-3-1, o emplear a Isco o James Rodríguez al puesto de interiores, aunque no sea su posición natural.

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