Después de más de una década, el manga de “Shingeki no Kyojin” cerró con varias grandes revelaciones que pocos vieron venir. Por supuesto, los fanáticos estaban ansiosos por saber cómo se abordaría el tema de los Titanes en la final, ya que la supervivencia de estas personas parecía imposible antes de que se revelara la verdad que Eren compartió con los eldianos.
”Attack on Titan” comenzó a publicarse en septiembre del 2009 bajo la pluma de Hajime Isayama, quien en ese entonces había cerrado un acuerdo para que su trabajo llegara regularmente a Kodansha. Eventualmente, la serie también generó un anime producido por Wit Studio, quien estrenó la primera temporada en abril del 2013.
Desde ese momento, “Shingeki no Kyojin” se convertiría en todo un fenómeno en todo el mundo, subiendo rápidamente de puesto entre las series de animes más vistas por los increíbles giros en su historia. Al final, todos se sorprendieron de ver que Eren se transformaba en el villano que años antes había jurado destruir.
Ahora, con la publicación del manga 139 de “Attack on Titan”, se sabe que lo hizo porque era la única manera de liberar a su pueblo de la maldición de los titanes, una que los había mantenido como esclavos por muchos años. ¿Qué pasó exactamente para que se liberaran y cuál es el estado de la maldición? Aquí te contamos todos los detalles.
Como se mencionó en algunos episodios de “Shingeki no Kyojin”, en el pasado Ymir Fritz había sido “bendecida” con la capacidad de transformarse en una Titán, un poderoso ser que ayudó a los eldianos defenderse y conquistar muchas tierras de su continente. Sin embargo, cuando Eren entra a Los Caminos y logra hablar con ella, se da cuenta de la terrible verdad.
Resulta que ella había amado por encima de su vida al Rey Fritz, su esposo, quien se aprovechó de su poder y comenzó lo que en realidad era una maldición: el poder de los Titanes que ella tenía se dividió en 9 cuando falleció, haciendo que nueve eldianos siempre heredaran alguno de esos poderes titánicos y solo puedan vivir por 13 años desde que consiguieron su poder.
Lastimosamente, no se dan detalles sobre este poder o si de verdad la maldición funcionaba de esta manera. Lo único que queda claro es que Ymir estaba atrapada en ese bucle sin fin de la cual no veía salida, hasta que Eren consiguió el poder de los titanes y él pudo dejar todo en movimiento para liberar a Ymir y los eldianos.
Toda la situación quedó clara cuando “Attack on Titan” estrenó el capítulo 139, donde la resistencia contra Eren había logrado finalmente acorralarlo y era tarea de Mikasa cortarle la cabeza para detener El Retumbar. Resulta que esto provocó que la maldición de los titanes se haya roto por fin y los eldianos ahora están libres del terrible poder que pesa sobre ellos.
Armin es quien confirma que la maldición terminó cuando se despierta de una conversación con Eren en Los Caminos. Cuando aparece Mikasa, admite recordar su charla con Eren, y le dijo a la heroína que su decisión de liberar a Ymir a través de la muerte de Eren trajo la libertad a todos.
“El resultado de tu elección haría que el Poder de los Titanes desapareciera de la faz de este mundo”, compartió Armin. Ahora, parece que la maldición de los titanes se ha ido para siempre, ya que Ymir también ha sido liberada de Los Caminos. Su descendencia ya no puede propagarse, así que esto significa que Armin y Reiner son liberados de sus malditas vidas junto con Annie, pero eso no es todo.
Cualquier Titán normal que se hizo a partir de un Eldiano ha vuelto a la normalidad, por lo que la familia de Connie por fin ha vuelto. Este cambio general es enorme y tuvo un gran costo. Eren sacrificó más de la mitad de la humanidad por su causa genocida, y Mikasa se vio obligada a matar al hombre que amaba.
Su terrible destino liberó a Ymir de su propio infierno personal después de que no pudo tratar a su esposo de manera similar hace décadas. Y ahora, Mikasa debe encontrar un nuevo propósito en la vida a medida que crece este nuevo mundo sin titanes mientras que los eldianos siguen intentando convencer al mundo que ya no son un peligro para la humanidad.
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