Dragon Ball Super tiene un plan para el futuro de la animación en Japón. Lo que vimos en el Torneo de Poder es una muestra del futuro y One Piece es un proyecto que viene recogiendo la batuta de Goku para ampliar aún más la calidad de los diseños del anime.
Miles de fans asistieron a los cines para ver el regreso del Saiyajin Legendario y a Gogeta en el canon de la historia. Pero para llevar a la pantalla grande esta trama, se contrató a Tatsuye Nagamine como director, quien a su vez se apoyó de Naohiro Shintani para renovar el estilo gráfico de los personajes.
Como era de esperarse, Dragon Ball Super gustó a millones en todo el mundo, convirtiéndose en la película más taquillera de la historia de la franquicia. One Piece no se quería quedar con los brazos cruzados así que contrató a Nagamine para que esté a cargo de su último arco argumental.
Era de esperarse que tarde o temprano lleguen similitudes entre ambos animes. Además, Toei Animation no permitiría que sus series copien exactamente algunos pasajes entre ellos. Solo hay que disfrutar de impecable trabajo del mangaka y director.
Dragon Ball Super todavía no cuenta con una fecha oficial de regreso a la pantalla grande. No obstante, el manga ya adelantó que la siguiente saga abordará la historia de la Patrulla Galáctica y Moro, el consumidor de planetas.
One Piece, por otro lado, estrenó hace poco su capítulo 892. Esta serie simplemente no para de sorprender con la continuidad de sus episodios. El ocho de septiembre llegaría un nuevo estreno, pero habrá que esperar los subtítulos al español.