Este es un tema que muy poco se comenta en las redes y en noticias. Pero los eSports también se ven envueltos en casos de dopaje. El problema es que muchas ligas competitivas no cuentan con regulaciones claras para estas incidencias.
A diferencia de otras competiciones en donde se busca tener mejor desempeño físico, en los eSports se busca una mayor concentración mental. Hay actualmente medicinas que se venden en farmacias que ayudan a este fin, sin necesidad de una receta médica.
Sin embargo, hay casos muy sonados de declaraciones de uso libre de Metilfenidato o más conocido como Ritalina. Este fármaco es diagnosticado para tratar casos severos de déficit de atención y concentración, también en unos casos para tratar la depresión y fatiga.
Un supuesto competidor del eSport de Counter Strike: Global Offensive realizó una declaración anónima sobre las condiciones de los jugadores en la competición Dreamhack. Contaba que veía el fármaco en las concentraciones como si fuera aspirina, con total normalidad y sin restricción de parte de los organizadores.
En el 2015, el jugador Kory "Semphis" Friesen que formaba parte del plantel de Cloud 9 admitió públicamente que todo el equipo había consumido sustancias para mejorar su desempeño en Electronic Sports World Cup 2015. En este caso en específico se trataba de Adderall, un fármaco similar a la Ritalina que se usa como potenciador cognitivo.
Tras estas declaraciones la ESL decidió ese año poner duras sanciones y regulaciones al uso de estas sustancias. El problema es que no todos toman el caso con la misma seriedad. Hay eSports que no se han pronunciado al respecto y la salud de varios profesionales corre riesgos.
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