Una serie de Netflix acaba de estrenarse para entregar una historia sobre el rock argentino y el disco más vendido de la historia de su país: más de un millón de copias hasta 2012. El programa, de una sola temporada con ocho capítulos, está disponible en la plataforma de streaming desde el miércoles 26 de abril, lo que ha entusiasmado a los fanáticos de la música que sonó en momentos críticos de la historia reciente de Argentina.
Lo que suena en las radios, celulares y otros dispositivos dicen mucho de cada época: sus valores, sus luchas, su manera de afrontar la vida. Cada línea, hasta las más apolítica o ligera, es reflejo y reacción de la realidad que atraviesa cada capa de la vida de sus artistas y de su público.
Así pasó en Argentina durante la década de los 70: el rock se convirtió en una resistencia y respuesta a la asfixiante dictadura militar. El gozo de la juventud, su arte y sus ideales, surgieron con mayor fuerza mientras más restricciones y vulneraciones de derechos se daban en las calles de Buenos Aires, Rosario, La Plata, Córdoba.
De igual manera, con la llegada de la democracia, los nuevos retos sociales, la exploración del sentir, la música viró hacia otras sensibilidades. El dolor más personal, las obsesiones, el malestar de una época, más que antes, se plasmaron en la letra y las canciones de un músico argentino que se topó con la fama de porrazo. Y el amor, por supuesto, al que siempre se le canta innumerables formas, fue el protagonista de ese disco irrepetible.
“El amor después del amor” es la serie de Netflix que cuenta parte de la biografía de Fito Páez y cómo se hizo el disco que da título a la producción televisiva. La historia está basada en las memorias del músico rosarino, que fueron publicadas en el libro “Infancia y juventud”. Desde ese dato, lo que se verá es la historia oficial del argentino.
Por ello, el programa está hecho para los fanáticos de Fito Páez y, quizás, para algún curioso que quiera saber más de la vida del compositor y que no haya leído la publicación de 2022, editado por Planeta. Si bien no hay mayores novedades en cuanto a lo biográfico, la adaptación es más que plausible.
Lo más visible es el increíble casting para el elenco, el cual ha calzado casi a la perfección con los personajes como Charly García (Andy Chango), Fabiana Cantilo (Micaela Riera), Juan Carlos Baglietto (Joaquín Baglietto) y sobre todo el mismo Fito de joven (Ivan Hochman) y de niño (Gaspar Offenhenden). La producción, desde ese punto de vista, es impecable, al igual que la música y la ejecución de momentos icónicos de esta historia.
La serie también es una mirada a los ensayos, las horas fértiles o frustrantes en los estudios de grabación, los conciertos, toda la carrera de un artista emergente que lidia con su presente (la salud de su padre Rodolfo Páez, el crimen de su tía Josefa Páez y abuela Delma Zulema Ramírez, el amor de Fabiana y de Cecilia Roth) y el pasado (la muerte de su madre Margarita Zulema Ávalos).
Si eres fan del rock argentino, te vas a emocionar y mucho. Porque la banda sonora es impresionante: la trova rosarina, Sui Generis, Baglietto, Almendra, Luis Alberto Spinetta, Serú Girán, Virus y, por supuesto, el gran Charly García, quien se merece una serie hace un buen tiempo (casi opaca la de Fito).
Le pueden reclamar mucho a la serie “El amor después del amor” por la historia que Fito Páez quiere mostrar: el poco riesgo en los claroscuros o casi ninguna revelación que lo ya conocido. Pero es la mirada del músico argentino, nadie puede decirle quién es, parafraseando a la canción que da título al disco. No es una propuesta periodística o la biografía escrita por alguien más. Es el Fito Páez para sus fans.
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