“La Civil” se estrenó en Cannes 2021, generando una gran expectativa en torno a su historia. La película belga filmada en Durango, México, que retrata la crudeza de un país sumergido en la violencia, tuvo una ovación de aproximadamente 8 minutos en el Festival de cine francés. La obra es la primera cinta de ficción de Teodora Mihai, directora rumana.
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La cinta está basada en hechos reales y es una producción hecha en conjunto entre México, Bélgica y Rumania. “La Civil” sigue una historia que retrata la realidad de los feminicidios en México y el efecto que tiene en las familias de las víctimas. La actriz Arcelia Ramírez es la encargada de interpretar a la portagonista.
DE QUÉ TRATA “LA CIVIL”
De acuerdo con la sinopsis oficial: “La Civil” es la historia de Cielo, “una madre cuya hija adolescente es secuestrada en el norte de México. Cuando las autoridades no se ofrecen a apoyar a la búsqueda, Cielo toma el asunto en sus propias manos y se transforma de ama de casa en una militante vengativa”.
“La Civil” aborda uno de los temas más problemáticos en el México contemporáneo: la inseguridad y el narcotráfico, desde el punto de vista de su protagonista. La cinta va desde la desaparición forzada de Laura, hasta el involucramiento de Cielo en el ejército mexicano en búsqueda de sus secuestradores.
Reproducir de manera ficcional a la mujer es hablar, según su directora, de un tema que sigue ocurriendo en un país sumergido en la violencia. “Es posible que la crítica se pregunte para qué mostrar algo que ya sabemos que está sucediendo”, comentó Teodora Ana Mihai a AFP, y explicó “Mientras continúe, hay que seguir hablando de la violencia en México”.
LA HISTORIA REAL DETRÁS DE “LA CIVIL”
La película relata la historia de Miriam Rodríguez Martínez, una madre que buscó a su hija durante tres años y que fungió como una de las principales activistas en temas de denuncia y búsqueda de desaparecidos en México.
La mujer le contó su historia a la directora, quien decidió retratarlo en una obra. Según lo mencionado por la realizadora, originalmente iba a ser un documental, pero terminó siendo un relato ficción para, además de proteger a la propia madre, empatizar con cada una de las familias que han sufrido una situación similar.
Rodríguez Martínez contó que su hija Karen, de 16 años, fue secuestrada en Tamaulipas y para rescatarla los criminales solicitaron recompensa en varias ocasiones. La familia pagó el dinero, pero nunca recibieron de vuelta a la joven; cansada de los chantajes decidió acudir las autoridades por ayuda, la misma que nunca llegó.
Es así que desde 2014, año en que ocurrieron los hechos, tomó una pistola, tarjetas de identificación falsas y básicamente se transformó en una detective que buscaba encontrar a los responsables. Luego de varias investigaciones logró identificar a los autores del secuestro y los encerró en la cárcel.
Miriam Rodríguez Martínez se hizo pasar por diferentes personas para conseguir nombres y direcciones, llegando a conocer hasta a los familiares de los responsables. En tres años logró encontrar el cuerpo de su hija y 10 culpables de su feminicidio. Sin embargo, tres de los hombres que había logrado capturar escaparon de la cárcel en 2017, la buscaron y la asesinaron frente a su casa.