Una de las tantas licencias que se ha tomado Netflix con el live-action de “One Piece” es generar un acercamiento más que inusual entre Nami y Zoro, los personajes interpretados por Emily Rudd y Mackenyu. Lo que no existe en el anime ni en el manga, se deslizó en los ocho capítulos de la serie que lidera las listas de preferencia de 86 países, superando a “Stranger Things” y “Wednesday”, las cuales triunfaron en 83 territorios.
Este matiz curioso de la navegante y el espadachín de los Sombreros de Paja generó un debate entre los seguidores de la historia de Eiichiro Oda, quien antes, en uno de sus habituales mensajes, había deslizado que el posible interés romántico de Luffy sería Nami.
Esto ha sido dejado de lado por los escritores de la plataforma de streaming, quienes no solo han cambiado escenas y personajes de la ficción original, sino que hasta han llevado la interacción de los Mugiwara por caminos inesperados.
Sin embargo, hay una gran razón por la que Zoro y Nami no pueden ser pareja en la serie de Netflix, que ya parece un universo paralelo al del anime y el manga. Y, sí, el mangaka japonés tiene que ver en el descarte total de la posibilidad de que se vea esta pareja en el streaming.
La respuesta más directa es porque Eiichiro Oda le exigió a Netflix que no haya ningún tipo de romance entre los protagonistas del live-action de “One Piece”. El escritor y dibujante, de esta manera, anuló cualquier posibilidad de que los guionistas de la plataforma de streaming inserten historias de amor romántico entre los Sombrero de Paja.
Así lo indicó el co-showrunner de la serie, Steven Maeda, en una entrevista con TVLine. “Uno de los mandatos de Eiichiro Oda estaba en contra del romance en la tripulación (de los Mugiwara). Eso es un rotundo no, en lo que respecta al manga y al programa de acción en vivo”, dijo al citado medio.
A pesar de esta indicación, queda claro que Netflix igual ha tomado sus riesgos, como el hecho de que Kaya bese a Usopp en el capítulo 4 de la temporada 1. Las conversaciones y complicidad de Nami y Zoro, lo que se interpretó como un posible interés romántico, no fue algo calculado según Maeda.
Agregó que se sintió así porque los personajes y actores “tenían una gran química juntos”. “Pero ciertamente esa no era la intención. Una de las cosas divertidas de mirar televisión es lo que lees dentro de esta y lo que aportas cuando miras un programa”, detalló.
Como en la política, en la escritura no hay tantas coincidencias. Lo cierto es que, si hay una temporada 2, esa química “espontánea” de Zoro y Nami no llegará a ningún puerto. A menos que Eiichiro Oda cambie de opinión y deje que Netflix haga lo que quiera con su historia de piratas.
El live-action de “One Piece” se encuentra disponible en la plataforma de streaming Netflix desde el jueves 31 de agosto. Para ver los ocho capítulos de su temporada 1, de manera online, debes tener una suscripción y luego hacer click en este enlace.
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