El actor y productor Tom Hanks es uno de los intérpretes más reconocidos de Hollywood y muchas de sus películas han recibido reconocimiento internacional, entre ellas “Splash” (1984), “Big” (1988″, “A League of Their Own” (1992), “Sleepless in Seattle” (1993), “Forrest Gump” (1994), “Apolo 13″ (1995) y “Saving Private Ryan” (1998).
Respecto a esta última cinta, dirigida por Steven Spielberg y escrita por Robert Rodat, el famoso intérprete de 65 años contó en una entrevista con New York Times que hizo algunos cambios al guion de “Rescatando al soldado Ryan”, filme que destaca por su recreación muy realista de la guerra.
En la película bélica épica ambientada en la invasión de Normandía durante la Segunda Guerra Mundial, Tom Hanks interpretó al capitán John H. Miller del ejército de los Estados Unidos que junto a siete hombres emprende la búsqueda de un paracaidista, el soldado James Francis Ryan (Matt Damon). Pero ¿a qué cambios se refiere?
LOS CAMBIOS QUE HIZO TOM HANKS
Durante la entrevista antes mencionada, Tom Hanks explicó que en ocasiones su imagen de “buen tipo” parecía imponerse a lo que sus personajes requerían. Por ejemplo, reveló que en “Rescatando al soldado Ryan”, Steven Spielberg le dijo: “No creo que quiera ver a John Miller disparar su arma y matar alemanes”, así que el respondió: “Lo siento, Steven. No vas a traerme hasta aquí y convertirme en otro tipo solo porque no quieres que Tom Hanks mate soldados”.
Asimismo, relató que sucedió algo similar en “Forrest Gump”. En la escena de la emboscada en Vietnam, el director Robert Zemeckis quería que el protagonista se confundiera y escapara. Pero el ganador de un Premio Óscar por esta película argumentó lo contrario: “Bob, ¿Por qué estoy interpretando a un soldado que es realmente bueno en su entrenamiento básico sin que luego me muestre disparando una serie de rondas?”
Tom Hanks también habló sobre la posibilidad de quedar atrapado en el papel del “héroe, al tipo en quien se podía confiar, al tipo común que se encuentra en circunstancias extraordinarias”.
“Tengo un semblante cinematográfico particular que llevo a cualquier película, de la misma manera que De Niro lleva una malevolencia a cada papel que interpreta. Puede haber nuevas formas de explorar lo que eso significa. Por ejemplo, cuando Clint Eastwood dijo: ‘¿Quieres ser Sully?’ Le dije: ‘Ya he interpretado ese papel antes’, y él dijo: ‘Sí, lo has hecho”. Lo tomé como un desafío. Es como si estuviera diciendo que todavía hay algo sin instalar. Gary Cooper y Humphrey Bogart y Bette Davis y Jimmy Stewart aportaron su semblante a cada película y estábamos buscando un nuevo giro. No hay ningún objeto brillante que agites a la audiencia para que olviden ese semblante”, agregó el actor que ha sido candidato a numerosos premios a lo largo de su carrera.
“Entonces, la pregunta más importante que debe hacerse es: ¿Es el comportamiento de cada nuevo personaje auténtico para el comportamiento humano reconocible? Tomemos ‘Greyhound’: ¿Tom Hanks en uniforme? Dios, no hemos visto esto lo suficiente. ¿Yo haciendo lo correcto? Oh, eso es nuevo. Todo eso está en esa película, pero es a través de un filtro de un personaje que está asustado, y eso es diferente. Es el mismo semblante y el mismo ‘Confía en mí, amigos’, pero el costo se vuelve palpable”.