El stalkerware es un tipo de software malicioso diseñado para espiar y acechar a individuos sin su conocimiento ni consentimiento y, recientemente, se ha vuelto tendencia en el mundo digital. La compañía de ciberseguridad ESET precisa que el stalkerware, también conocido como spyware, se infiltra en dispositivos móviles y computadoras sin que el usuario sea consciente de su presencia para monitorizar de manera encubierta las actividades de la víctima, desde mensajes de texto y llamadas telefónicas hasta ubicaciones GPS, correos electrónicos, historial de navegación y más.
La empresa añade que lo más alarmante es que muchas veces es instalado por personas cercanas a la víctima, como parejas íntimas, familiares o acosadores. “Hace unos años hablábamos del Stalkerware para Android como una amenaza cada vez más peligrosa con riesgos incluso para quienes espían. En aquel entonces, los datos de la telemetría ESET había detectado un aumento del stalkerware en estos sistemas operativos. Si bien ahora se identificó un descenso de la actividad de este tipo de software, esto no implica que su actividad este fuera de juego”, comenta Mario Micucci, Investigador de Seguridad Informática de ESET Latinoamérica.
El uso de stalkerware plantea implicaciones graves para la privacidad, la seguridad y el bienestar emocional de las personas afectadas. Además de violar la intimidad, puede llevar a situaciones de acoso, manipulación, chantaje e incluso violencia física. Las víctimas pueden sentirse constantemente vigiladas, experimentar estrés emocional extremo e incluso ser coaccionadas debido a la información recopilada por el stalkerware.
Detectar la presencia de stalkerware puede resultar difícil, ya que a menudo opera en segundo plano, camuflado entre aplicaciones legítimas. Algunos signos de alerta incluyen un rápido agotamiento de la batería, un rendimiento lento del dispositivo o un uso inusualmente alto de datos. Sin embargo, la prevención y la concienciación siguen siendo las mejores armas contra esta amenaza invisible que acecha en el mundo digital.
“El uso del stalkerware plantea serios problemas éticos y legales. En muchos países, la instalación de stalkerware sin el consentimiento explícito de la persona monitoreada es ilegal y puede conllevar consecuencias legales para el perpetrador. Algunos gobiernos y organizaciones están tomando medidas para regular y penalizar el desarrollo, distribución y uso de este tipo de software”, agrega Micucci de ESET.
Si fuiste víctimas de stalkerware, buscar apoyo es fundamental. Organizaciones dedicadas a la lucha contra la violencia doméstica y el acoso, así como los servicios de asesoramiento y líneas directas de ayuda, pueden proporcionarte orientación, recursos y asistencia para abordar esta situación tan delicada.
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