La ciberseguridad puede parecer un rompecabezas desafiante para resolver. Con la cantidad de direcciones de correo electrónico y números de teléfono que utilizamos para registrarnos en servicios en línea, acceder a sitios web o aplicaciones, e incluso realizar compras, no es de extrañar que proteger nuestra privacidad se haya vuelto una tarea difícil y complicada.
ESET ha compartido 5 sencillas tácticas para proteger nuestra seguridad en línea y mantenernos fuera del radar. ¿Estás listo para dar un paso adelante en tu seguridad digital?
La próxima vez que necesites acceder a contenido restringido o te registres en un servicio que solo vas a usar una vez, prueba con una dirección de correo electrónico descartable. Estos servicios permiten el uso de un correo temporal que se autodestruye tras un tiempo programado, evitando así acumular correos de spam.
Pero ten cuidado, nunca uses este tipo de servicios para comunicaciones que contengan información sensible. Recuerda: tu seguridad es lo primero.
Mantén tu cuenta de correo principal solo para comunicaciones familiares y personales. Para el resto de interacciones online, como contactos bancarios, del gobierno y suscripciones a newsletters, crea una dirección de correo secundaria.
Servicios como ProtonMail ofrecen encriptación extremo-a-extremo para mayor seguridad. Si eres usuario de Apple, puedes usar la función “Ocultar mi Email”, que crea una dirección única que enmascara la real. Usuarios de Android, pueden optar por alternativas como Firefox Relay.
El número de teléfono puede ser un talón de Aquiles en términos de privacidad. Conseguir una tarjeta SIM prepaga puede ser una gran solución. En muchos países, estas tarjetas no requieren identificación del usuario y puedes usar este número para todo registro online. De esta manera, tu número real solo se comparte con fuentes confiables, ayudándote a mantener el anonimato.
Hacer compras en línea es increíblemente conveniente, pero también puede ser un riesgo si el sitio donde compras sufre un robo de información.
Algunos bancos y billeteras virtuales ofrecen tarjetas virtuales de un solo uso que se conectan a una tarjeta real. Tras realizar una compra con esa tarjeta, el sistema del banco destruye los detalles de la misma, generando una nueva para la próxima compra. Así, los ciberdelincuentes no pueden obtener tu información real.
La autenticación de dos factores (2FA) es una herramienta efectiva para proteger tus cuentas online. Además de tu contraseña, se requerirá un segundo código de identificación. De este modo, incluso si alguien obtiene tu contraseña, no podrá ingresar a tu cuenta sin el segundo código.
Para esta segunda capa de seguridad, puedes usar aplicaciones de autenticación como Microsoft Authenticator, que genera un código temporal.
Escucha Dale Play en Spotify. Sigue el programa todos los lunes en nuestras plataformas de audio disponibles.
Contenido GEC