Desde las madres modernas y tecnológicas hasta aquellas que recién inician con el manejo de aparatos móviles, pueden aprovechar los beneficios del uso de la domótica en el hogar.
La domótica es el uso de herramientas tecnológicas que busca automatizar procesos, también se busca la gestión eficiente de la energía y aportar a la seguridad de un hogar. Básicamente, conectamos tareas diarias y rutinarias a un aparato tecnológico.
Se puede controlar la iluminación, climatización, seguridad, control de energía de electrodomésticos y mucho más.
Los asistentes virtuales como Amazon Echo (Alexa) o Google Home pueden facilitar las tareas cotidianas. Puedes pedirles que hagan listas de compras, reproduzcan música, te den el pronóstico del tiempo, e incluso que te recuerden cuándo es el próximo partido de fútbol de tus hijos.
Los cerrojos inteligentes (Smart Locks) proporcionan una mayor seguridad y comodidad. Puedes cerrar y abrir las puertas de tu casa a distancia, programar códigos de acceso para familiares y amigos, e incluso recibir alertas cuando alguien entre o salga de tu casa.
Los termostatos inteligentes, como el Nest, pueden aprender tus patrones diarios y ajustar la temperatura de tu casa de manera eficiente, ahorrándote dinero en facturas de energía y mejorando tu confort.
Las bombillas inteligentes te permiten controlar la iluminación de tu hogar desde tu smartphone. Puedes programarlas para que se enciendan y apaguen a determinadas horas, ajustar su intensidad e incluso cambiar su color.
Las cámaras de seguridad inteligentes te permiten vigilar tu hogar desde cualquier lugar. Puedes recibir alertas en tiempo real si detectan movimiento y también pueden ayudarte a vigilar a tus hijos o mascotas cuando no estás en casa.
Los robots de limpieza, como el Roomba, pueden hacer la limpieza por ti. Puedes programarlos para que limpien a ciertas horas del día y mantener tu casa limpia sin esfuerzo.
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