Exploramos el Moto G50 5G, un dispositivo que, a pesar de su sensación plástica, exhibe una estructura sólida. Las huellas son inevitables, pero cuenta con un protector transparente en la caja. Destaca por su lector de huellas, botón para Google Assistant, altavoz único que puede saturarse a máxima potencia, y puertos USB-C y Jack.
La pantalla IPS de 6.5 pulgadas, con una tasa de actualización de 90 Hz y una resolución de 1600 x 720, impresiona por sus ángulos de visión, brillo máximo y calidad de tonos. Sin embargo, la densidad de píxeles de 269 ppi podría considerarse relativamente baja.
Impulsado por el procesador MediaTek Dimensity 700, respaldado por 4GB de RAM y 128GB de almacenamiento, el Moto G50 5G permite disfrutar de juegos a 60 FPS sin ser demasiado exigente. Con Android 11, la personalización es sencilla, y la inclusión de Gametime con el Modo Inmersivo añade una capa adicional de experiencia. La batería de 5000 mAh se carga en dos horas y ofrece poco más de un día de duración.
Las cámaras traseras, compuestas por un lente principal de 48MP, un macro de 2MP y un sensor de bokeh de 2MP, brindan resultados satisfactorios en condiciones de buena luz. La cámara frontal de 13MP permite grabar a 1080 x 1920, pero la calidad disminuye en condiciones de poca luz.
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