Pokémon es una franquicia japonesa que se ha caracterizado por su mundo casi perfecto. La gente se dedica a la crianza de estas criaturas fantásticas mientras los villanos no acaban siendo tan terribles. Al menos, el Equipo Rocket eran tan tontos como inútiles y sus planes siempre acababan dejando una sonrisa. Sin embargo, hay ciertas criaturas que tienen una historia deprimente.
Yamask (versión Pokémon Black) tiene la apariencia de una máscara mortuoria de faraón dorada. La criatura parece estar basada en el ba, la manifestación espiritual de un fallecido después de su muerte según la mitología egipcia.
Banette (versión Pokémon Esmeralda) es un muñeco de peluche abandonado que se convirtió en Pokémon. Se dice que viven en basureros y deambulan en busca de los niños que los tiraron.
Phantump (versión Pokémon Y), según los cuentos más antiguos, es un muñón poseído por los espíritus de los niños que murieron perdidos en el bosque.
Mimikyu (versión Pokémon Sun) es un verdadero misterio. Se desconoce su apariencia real. Un erudito que vio lo que había debajo de su trapo se sintió abrumado por el terror y murió a causa del susto.
Komala (versión Pokémon Sun) es un Pokémon que nace dormido y muere dormido. Todos sus movimientos aparentemente no son más que el resultado de dar vueltas y vueltas en sus sueños.
Pokémon Scarlet y Violet ya es uno de los títulos más esperados de 2022 para la consola Nintendo Switch. Lo novedoso de este juego es que adoptará las últimas tendencias que hemos visto en la franquicia: los diseños en 3D y un mundo abierto en donde los gamers podrán capturar a sus criaturas favoritas.
Se pondrá a la venta el 18 de noviembre de este año y tendrá lanzamiento exclusivo para la consola portátil Switch.
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