Bethesda Game Studios es uno de los protagonistas a la hora de hablar de estudios especializados en los videojuegos de rol. Desde la saga The Elder Scrolls hasta Fallout, este desarrollador siempre ha sabido llegar a los jugadores con títulos interesantes y que crean escuela. Después de 20 años, una nueva propiedad intelectual se asoma y promete ser el trabajo que demuestra todo lo que han aprendido y cómo han evolucionado como estudio. Así nace Starfield.
A nivel argumental, Starfield comienza con una premisa sencilla: nos encontramos en una excavación y descubrimos un extraño material que reacciona a nosotros. Este hecho nos hace recorrer la galaxia junto a “constelación” un grupo que servirá de hilo argumental para descubrir los misterios del universo y del extraño aparato. La historia, sin ser muy profunda, está llena de referencias a grandes películas e historias del género de ciencia ficción. Si bien muchas situaciones son algo predecibles, cuenta con la potencia necesaria para mantener el interés y la sorpresa.
Starfield mantiene la filosofía de Bethesda donde si bien existe una historia principal, está direccionada para que el jugador tenga su propio ritmo y viva el universo a su manera, siendo uno de los principales atractivos. Quizás el inicio no sea tan potente como The Elder Scrolls V: Skyrim, pero mantiene la misma idea que es la historia del jugador, eligiendo amigos, enemigos y demás. Esa sensación de libertad, típica de los videojuegos de Bethesda Game Studios, está muy bien lograda.
A nivel jugable, es un shooter y rol con vista variable que mejora notablemente lo visto en Fallout 4. Starfield tiene un “gunplay” bastante correcto y divertido. La gran cantidad de armas, habilidades y mecánicas jugables hacen que cada jugador pueda encontrar un estilo propio de juego y eso es muy valioso. Starfield se siente único para cada jugador y no solo el ritmo es personal, sino también la forma de jugar.
Es interesante ver como detalles como la gravedad única de cada planeta influye en las leyes de juego, desde nuestra movilidad hasta la reacción del entorno. Me parece alucinante como Bethesda se ha superado a sí misma a la hora de los detalles, siendo un juego que se percibe fue creado con mucho mimo y dedicación.
Como es esperable, la gran cantidad de contenido que contiene Starfield es sobresaliente. No solo la cantidad de historias secundarias (que algunas pueden llegar a ser muy interesantes) o misiones de facción. Creo que las mejores historias del videojuego están escondidas entre las secundarias ya que le da más profundidad y hace justicia a muchos de los personajes secundarias, que tienen un trasfondo interesante. Esta es una de las características del estudio, crear personajes interesantes y que vale la pena conocer, en muchas ocasiones estos le dan un sentido adicional a la trama.
Starfield si bien es un juego de aventura espacial, esto significa que muchos de nuestros viajes van a transcurrir en el espacio, aquí es donde aparece uno de los errores más significativos del juego: la nula transición entre nuestra aventura en los planetas y el espacio. Para viajar a un planeta debemos seleccionarlo en el menú y después de una cinemática, estaremos en el planeta. Este a su vez, no es un mundo abierto y también estará delimitado en base al punto en el que hayamos decidido aterrizar. Starfield en este aspecto parece dos juegos muy diferentes.
Que todo el viaje se defina por un menú de selecciones hace que el buen trabajo de inmersión se corte completamente. Si bien hay batallas espaciales que son muy cumplidoras, que tengamos un impedimento real de viajar a un planeta con nuestra nave hace que se sienta extraño. Lamentablemente, hay juegos que hacen esto de una forma casi perfecta y siendo Bethesda, con el tiempo de desarrollo y el presupuesto, parece increíble que esto no haya sido posible.
Quizás sea un tema ligado al motor gráfico ya que se sigue utilizando el Creation Engine. Algo que se nota completamente cuando hablamos del aspecto técnico del juego. Si bien es un título con un diseño artístico precioso, no es un juego que haga notar su poderío técnico a pesar de las grandes exigencias de hardware. Starfield sigue manteniendo esos personajes acartonados, en donde las conversaciones son planos generales donde interactúan los personajes, algo que se ve bastante veo y que sorprende que siga siendo utilizado al día de hoy.
Sorprende bastante que en otros juegos de la misma compañía, como The Evil Within 2, se cambió el motor gráfico en beneficio del juego y para el caso de Starfield, se nota que Creation Engine ha limitado mucho el potencial del juego. Incluso a nivel de “bugs”, muchos de ellos aparecen por que de la misma manera en juegos anteriores, por lo que podemos decir que es más tema del engine versus la escala del proyecto.
A nivel sonoro, Starfield cuenta con muchos temas alucinantes y que transmiten la sensación de estar en una gran aventura de ciencia ficción. Se nota que Bethesda sabe de esto, por lo que ha programado conciertos sinfónicos con la banda sonora a días del lanzamiento de este videojuego.
Starfield es un juego alucinante y hay partes que hace increíblemente bien y otras no tanto. Si bien no es un juego perfecto, queda claro que va a quedar para la historia. Si lo vemos como un punto de partida para una nueva franquicia, creo que el futuro para este título es más que prometedor.
Ya sea con expansiones o con futuros mods del juego, está claro que Starfield tendrá tanto contenido como estrellas encontramos en el firmamento.
El análisis de Starfield fue desarrolladog gracias a una copia digital enviada por Bethesda para Xbox Series X.
FICHA TÉCNICA
• PLATAFORMA: PC, Xbox Series X|S
• DESARROLLADORA: Bethesda
• GÉNERO: Acción, Rol, Mundo abierto, Disparos
• DISTRIBUIDOR: Microsoft
• PUNTAJE: 8.5
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