Andy Ruiz jamás olvidará ese 1 de junio de este año cuando silenció el Madison Square Garden de Nueva York. Esto luego de noquear al británico Anthony Joshua, hasta esa fecha campeón peso pesado de la OMB, AMB y FIB, en el séptimo round del combate.
Durante la pelea, Ruiz derribó en cuatro ocasiones a Joshua, invicto hasta ese entonces. Y el juez, al ver las caídas, decidió detener las acciones en el séptimo round. “Quiero dar las gracias a Dios por darme esta victoria que parecía imposible. No puedo crecer que haya hecho mis sueños realidad”, dijo el mexicano tras el triunfo.
Y ahora luego de seis meses ambos volverán a verse las caras en Arabia Saudita. Y esta vez, los papeles se invirtieron, ya que Ruiz saldrá al ring como el campeón reinante; mientras que Joshua buscará la reivindicación en su revancha inmediata.
Para esta segunda entrega, Ruiz pesó 128 kilos, siete más que en su primer combate; por su parte, Joshua, bajó cinco desde esa vez para alcanzar los 107 kilos. El mexicano llega con un récord de 33-1 y Joshua con un marca de 22-1.