Como toda temporada, la 2022-2023 del circuito mundial de squash se cierra con el PSA World Tour Finals, un torneo de alto rango y donde se vienen enfrentando los ocho mejores squashistas del mundo con el objetivo de cerrar la campaña con un título. Para Diego Elías no es uno más, pues podría permitirle estar más cerca de volver a ser el número 1 del mundo en este deporte. Nuestro representante peruano sigue firme en ese objetivo y ahora disputará la gran final tras vencer al egipcio-inglés Mohamed ElShorbagy.
Con un 2-0 en el marcador final –con parciales de 11-5 y 11-6–, el ‘Puma’ no pasó apuros para dejar en el camino a uno de los squashistas más duros del circuito. El recorrido hasta aquí ha sido largo y no iba a dejar pasar la oportunidad de meterse en la pelea por un nuevo título, el cual lo definirá con el ganador del enfrentamiento entre Mostafa Asal y Ali Farag.
Esta nueva final será una de las más importantes de su carrera, pues el lunes tendrá la gran oportunidad de subirse a la cima del PSA World Tour. “Hoy (jueves) fue diferente. Ayer fue muy difícil, siempre es muy difícil contra Mostafa (Asal). Es un buen jugador de squash, pero tiene otro lado contra el que es muy difícil jugar cuando hay mucho contacto. Estoy feliz de haber podido recuperarme. ¡No pude dormir hasta las 6 de la mañana!”, había dicho al clasificar a las ‘semis’. Bueno, pues, finalmente terminó consiguiendo su objetivo: ganar.
La página oficial de la PSA World Tour dio a conocer, previo al PSA World Tour Finales de El Cairo, las opciones que tiene Diego Elías para convertirse otra vez en el número uno del mundo. Fueron cinco panoramas, pero ahora, el mejor squashistas de América mantiene solo una opción para pelear el trono. Y es que el ‘Puma’ debe proclamarse campeón del campeonato y que Ali Farag pierda en las semifinales, pero habiendo ganado dos partidos. Es decir, nuestro compatriota no depende de sí mismo, pero aún mantiene las esperanzas.
Sin lugar a dudas, no será tarea fácil volver al trono, pero la presente temporada de Elías ha sido de ensueño: no solo estuvo como el mejor jugador de squash del planeta durante cuatro semanas, sino que también se convirtió en el primer sudamericano en conseguir este logro. Además, consiguió tres títulos consecutivos (lleva 15 en total desde que compite en el World Tour).
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