Pocas historias de estrellas de la NBA son tan curiosas como la del camerunés Joel Embiid, quien se convirtió en figura en la liga de básquet más importante del mundo apenas seis años después de haber jugado ese deporte por primera vez: la figura de los Philadelphia 76ers soñaba hace no mucho con dedicarse al vóley profesional.
Joel Embiid nació en Yaoundé, Camerún, el 16 de marzo de 1994. A pesar de crecer en un país con alto índice de pobreza, 'JoJo' tuvo una infancia relativamente tranquila gracias al trabajo de su padre, Thomas Embiid, quien era coronel del ejército.
Desde pequeño, Joel Embiid fue muy apasionado por los deportes. Por su gran estatura, se animó a probar suerte en el vóley. Y su gusto por esta disciplina era tan grande, que su sueño era entrenar duro para viajar a Francia y convertirse en jugador profesional.
Pero Joel Embiid nunca imaginó que en 2009, cuando apenas tenía 15 años, su carrera deportiva daría un giro insospechado. Inspirado por un video de Hakeem Olajuwon (basquetbolista nigeriano que destacó en la NBA entre 1984 y 2002) y el consejo de su novia de entonces, decidió probar suerte en el básquetbol.
Joel Embiid se enamoró rápidamente de la pelota naranja y decidió dedicarse de lleno al básquetbol. Y un personaje clave en su crecimiento fue Luc Mbah a Moute (camerunés que milita en la NBA desde 2008), quien lo ayudó a viajar a Estados Unidos e incorporarse a las filas de la Montverde Academy.
El problema fue que, con sus 2.10 metros de estatura, a Joel Embiid le era imposible pasar desapercibido en la academia. Esto, sumado a su manera brusca de jugar y sus grandes problemas para hablar inglés, terminaron alterando su personalidad y, en consecuencia, terminó recibiendo bullying por parte de sus compañeros.
"La gente pensaba que crecí siendo pobre, viviendo en la selva y matando leones. Pese a que era muy tranquilo por entonces, decidí sacar provecho de ello. Comencé a asustarlos. Me agarraron miedo. Tuve que pelearme constantemente, sólo así conseguiría que dejaran de reírse de mí", explicó Joel Embiid sobre esa complicada etapa de su vida.
Aunque contaba con grandes condiciones para el básquetbol, Joel Embiid tuvo que trabajar mucho en pulir su técnica. Pues según relata Bleacher Report, el pívot camerunés era bastante torpe en sus inicios. "Sus compañeros de secundaria se rieron la primera vez que lo vieron jugando en Estados Unidos. En el mismo partido, un pase del base le dio en el estómago, tropezó y se cayó al salir del bloqueo. También se botó el balón en el pie tratando de driblear", contaba el artículo.
Los amargos momentos que pasó Joel Embiid en Montverde, lo obligaron a pedir su cambio a una escuela privada al norte de Florida llamada The Rock School. Con menos competencia en su equipo y lleno de confianza, el jugador camerunés empezó a despegar y llevó a su equipo a coronarse campeón del Southern Intercollegiate Athletic Association por primera vez en su historia.
En 2013, Joel Embiid decidió sumarse a las filas de la Universidad de Kansas. En este equipo compartió vestuario con Andrew Wiggins, quien actualmente milita en los Minnesota Timberwolves. En su primera temporada, la estrella camerunesa promedió 11 puntos, 8 rebotes y 3 tapones por partido, declarándose elegible para el siguiente Draft de la NBA.
Aunque estuvo cerca de llegar a los Cleveland Cavaliers, Joel Embiid sufrió su primera lesión de consideración: una rotura por estrés en el pie derecho. Sin embargo, los Philadelphia 76ers decidieron apostar por él y, al menos en un inicio, no les salió nada a cuenta: 'JoJo' se perdió toda la primera temporada (2014-15) y en el arranque de la segunda tuvo que ser operado nuevamente por la misma lesión.
Joel Embiid recién pudo lucirse con la camiseta de los 76ers en el inicio de la temporada 2016-17, pero la alegría le duraría poco. Justo después de sufrir una rotura de menisco en la rodilla izquierda, se enteró de la muerte de su hermano menor, quien falleció durante un accidente de tránsito en Camerún.
Aunque tomó en cuenta la idea de abandonar la NBA para volver con su familia, Joel Embiid decidió darse una nueva oportunidad en la temporada 2017-18. Y su esfuerzo valió la pena, pues empezó a romperla con los 76ers y el 15 de noviembre, en duelo ante los Lakers, batió su récord al anotar 46 puntos, 15 rebotes, 7 asistencias y 7 tapones.
Tras disputar su primer NBA All Star en 2018 (anotó 19 puntos, 8 rebotes y una asistencia para el Team Curry), Joel Embiid quiere dejar atrás el karma de las lesiones para dejar huella en la liga más importante del mundo. Por ahora, su límite todavía es desconocido.
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