A pesar de haber anunciado en su cuenta de Instagram que sufría con una intensa gripe, Pink pudo estar en el Super Bowl LII. Es la primera vez que canta en la final de la NFL, pero parece que la tensión le hizo una mala jugada.
Las cámaras enfocaron a la cantante a penas llegó al escenario. La música ya empezaba a sonar cuando la rubia decidió quitarse el chicle de la boca. Solo atinó a tirarlo en el estrado.
Las alarmas se encendieron cuando Pink hizo un anuncio en su cuenta de Instagram. La cantante, quien estaba encargada del himno nacional en el Super Bowl 2018, reveló que estaba luchando por superar un gripe que le impediría llegar a la final de la NFL.
Sin embargo, todo se trató de solo un susto. La ganadora de tres premios Grammy salió victoriosa al US Bank Stadium de Minnesota y pudo completar su tarea.
Justin Timberlake es otro de los artistas invitados al Super Bowl LII. El cantante será la atracción del show del medio tiempo, que protagonizará por tercera vez.
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