Rafael Nadal resurgió como un ave fénix en el 2017. Durante la temporada de arcilla, el español consiguió romper varios récords y ganar varios puntos para volver a lo alto del ranking mundial. Sin embargo, estos logros podrían costarle ahora un reto aún mayor.
Desde el lunes 2 de abril, Rafael Nadal volverá a ser el número 1 del mundo. Roger Federer, quien se lo arrebató hace un par de semanas, no pudo mantenerlo debido a un mal comienzo en el Masters 1000 de Miami (eliminado en su debut). El 'Chaval' tendrá una ventaja de 100 puntos (acumula 8.770) sobre el suizo.
Esta mínima diferencia pone en peligro su puesto en la clasificación ATP, en especial porque se vienen la temporada de polvo de ladrillo. Rafael Nadal consiguió el año pasado cuatro títulos en los cinco torneos que jugó en esta superficie y está obligado a obtener estos resultados en el 2018.
La única licencia que podrá tomarse será en Roma, donde con llegar a los octavos de final puede conservar los puntos. En todo lo demás, debe campeonar.
Sin embargo, esto podría verse afectado debido a una lesión muscular que lo ha alejado de las canchas. Rafael Nadal no juega desde enero, cuando fue eliminado en cuartos de final del Abierto de Australia.
Lo único que podría ayudarlo es que Roger Federer estará ausente durante los próximos meses. Se guardará para Wimbledon.
Contenido GEC