Más de 27.000 aficionados boicotearon el partido que Augsburgo y Borussia Dortmund empataron 1-1 en los mal recibidos partidos de lunes por la noche en la Bundesliga.
Los hinchas respondieron al pedido de no acudir al partido en protesta y los claros en las tribunas del estadio Westfalenstadion del Dortmund fueron notorios. La cancha del Dortmund tiene el aforo más grande en Alemania, con capacidad para más de 81.360 espectadores, y los que se presentaron no le dieron mucha emoción a la jornada.
“¡A favor de horarios justos para la afición! No a los partidos los lunes!”, rezó una enorme pancarta detrás del arco detrás de la tribuna sur, que suele ser copada por unos 24.500 aficionados. El Dortmund habitualmente tiene lleno completo en sus partidos en casa.
Pero las protestas no alcanzaron la magnitud de la ira de los hinchas del Eintracht Frankfurt en la primera función de un lunes la semana pasada.
Marco Reus alegró a los hinchas locales al anotar a los 16 minutos, definiendo con un globito sobre el zaguero rival Martin Hinteregger tras un contragolpe en el que intervinieron Mario Goetze y Andre Schuerrle.
“Sería una excusa simple y barata decir que no nos salieron las cosas porque el estadio no se llenó del todo”, comentó el técnico del Dortmund Peter Stoeger sobre el pálido rendimiento de su equipo. “No estoy satisfecho para nada”.
“Sería una excusa simple y barata decir que no nos salieron las cosas porque el estadio no se llenó del todo”, comentó el técnico del Dortmund Peter Stoeger sobre el pálido rendimiento de su equipo. “No estoy satisfecho para nada”.