El fútbol necesita directores técnicos de nivel para llevar el deporte rey al máximo nivel, y Josep Guardiola es uno de ellos. El estratega español es uno de los mejores del mundo, pero su temperamento lo ha llevado a discutir de una manera muy agresiva con algunos jugadores y árbitros.
Joshua Kimmich ha sido la última víctima del temperamento de Josep Guardiola, quien sin ningún reparo le dijo de todo en la cancha. Luego el español explicaría que confía mucho en el alemán y que todo es parte de una arenga para motivarlo.
Su discusión con Alexis Sánchez nunca pasará al olvido, ya que Josep Guardiola se enfureció con el chileno por lesionarse. El atacante mapochino no pudo continuar todo el partido cuando jugaba en Barcelona debido a que jugó un amistoso con su selección, y la fatiga muscular lo venció. Las malas palabras que utilizó el 'Pep' son inolvidables.
Su careo con los jugadores, sobretodo con Robert Lewandowski hace muy popular a Josep Guardiola, quien dirigirá a Manchester City la próxima temporada.
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(EZ)