Insólito lo que se vivió en Rosario, cuando Marco Ruben y Teo Gutiérrez, delanteros del equipo canalla, se pelearon porque ambos querían patear el penal cobrado a favor del equipo, en el partido contra Godoy Cruz por el Torneo Argentino.
Corría el minuto 40' del partido, el resultado era de 0-0, y una mano dentro del área local fue sancionada como infracción por el árbitro del encuentro; sin embargo, Rodrigo Rey atajaría el disparo.
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Tras la discusión entre el delantero argentino y el colombiano, fue el capitán quien tomó el balón para ejecutar la pelota parada. Ruben envió su disparo abajo y a la derecha del arquero, quien reaccionó de manera excepcional para evitar el gol.
Gracias a la atajada, el primer tiempo terminó con empate a cero entre dos equipos que buscan, a toda costa, los tres puntos para acercarse a posiciones importante e iniciar una buena dinámica en la reinauguración del campeonato.
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