Si alguien te pregunta alguna vez qué se pide a un equipo que quiere ser campeón, ponle el vídeo del partido del Barça ante Celta. El conjunto catalán ha renacido de las cenizas de la mano de Ronald Koeman. El técnico culé ha vuelto a dotar al equipo de trabajo, rigor y ambición, y eso se nota defensivamente. 0 goles en contra y 7 a favor en solo dos jornadas de Liga. Y ayer, con un jugador menos más de 45 minutos en una de las canchas malditas para los blaugrana.
El Barça se ha adaptado de un día para otro al fútbol moderno, presionando arriba y mostrando, sobre todo, compromiso e intensidad defensiva. Un golpe de efecto en un partido muy completo que ilumina de esperanza el futuro de un club que parecía enterrado.
Y dos cosas para terminar: la primera, que el control orientado y la definición de Ansu en su gol son de superdotado. Y la segunda, una pregunta: ¿la roja a Lenglet se la hubieran sacado a Sergio Ramos?
ADRIÀ COROMINAS
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