Es uno de los jugadores más polémicos. Muchos recuerdan su frase "me envidian porque soy guapo" en sus primeros años en Real Madrid, pero no le importa lo que digan de él. Y no es para menos. Año tras año, el atacante Cristiano Ronaldo demuestra con goles los casi 95 millones de dólares que el club blanco pagó por él al Manchester United.
El portugués es así, no se muerde la lengua cuando le hacen ciertas preguntas y una vez más lo demostró antes de partir hacia Milán para jugar una nueva final de Champions League, esta vez nuevamente ante los colchoneros del Atlético.
"Si conseguimos la Champions este sábado va a valer más que el doblete que ha ganado Barcelona. Esto es un sueño. Te lo digo de corazón que no lo cambio por nada del mundo", dijo Cristiano Ronaldo a los medios previo a tomar el vuelo a tierras italianas.
No obstante, la polémica no solo fue allí. Al también ex Sporting Lisboa le consultaron sobre qué pasaría si su pequeño hijo, con el pasar de los años, termina siendo seguidor del equipo de Lionel Messi, Neymar y el uruguayo Luis Suárez.
"Imposible que mi hijo sea del Barcelona. Tiene mis genes, aunque si esto sucede lo tendría que aceptar. Tampoco no lo llevaría al Camp Nou. Es mi hijo y lo amo", finalizó Cristiano Ronaldo.
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