Desde la banca de suplentes, Andrés Iniesta ha sido testigo de lo ocurrido entre Barcelona y Roma en la vuelta de cuartos de final en Champions League. El 'Cerebro' ha sufrido como todos los hinchas azulgranas.
Edin Dzeko (6') y Daniele De Rossi (58') dieron esperanza de clasificación a la 'Loba'. Para protegerse y ganar posesión en el medio sector, Ernesto Valverde hizo ingresar a André Gomes por el '8', esto a los 81'.
Cuando Andrés Iniesta se acomodó en la banca de suplentes, la Roma tuvo una pelota parada. El centro al primer poste terminó en las redes del arco de Barcelona. Konstantinos Manolas colocó el tercero para sus colores a los 82'.
En menos de un minuto, el griego sentenció la suerte de los azulgranas en Champions League. Desde la banca, el Manchego levantó los brazos en señal de incredulidad y su mirada se perdió en la celebración de los romanos.
El sufrimiento de Andrés Iniesta es entendible, pues el volante es muy hincha de Barcelona y es posible que esta sea su última temporada defendiendo los colores del cuadro catalán. Si es así, el 'Cerebro' deseaba levantar la 'Orejona' una vez más.