Antes de la primera media hora de juego, el Maccabi Haifa daba un golpe de aquellos en la Champions League. Se jugaba el minuto 24 del primer tiempo, cuando un error defensivo del Paris Saint-Germain terminó en gol del equipo local para desatar la algarabía plena en el estadio Sammy Ofer.
El extremo Dolev Haziza recibió un balón en tres cuartos de campo, avanzó unos metros y mandó un centro que encontró bien ubicado a Tjaron Chery, quien impuso condiciones en el juego aéreo y batió la resistencia del arquero Gianluigi Donnarumma con estupendo cabezazo al palo izquierdo.
La alegría no duraría mucho para el equipo israelí, pues solo 13 minutos más tarde el cuadro francés igualaría las acciones por medio de Lionel Messi. El argentino recibió una genial asistencia de Kylian Mbappé en el corazón del área y definió sin mayores problemas.
El PSG llega a este duelo con los ánimos al tope, luego de un gran inicio de temporada no solo en la Liga de Campeones, sino también en la competencia doméstica, donde son punteros. Para este partido, sin embargo, Christophe Galtier sufrió la baja de Kimpembe, quien sufrió una lesión en los isquiotibiales de su pierna izquierda.
Su baja supone un golpe para el técnico parisino, que ha impuesto un nuevo esquema con una defensa de tres centrales y dos carrileros, pero que no tiene suplentes experimentados para los primeros. Como se recuerda, el club de la capital francesa pasó todo el verano intentando fichar al central eslovaco del Inter, Milan Skriniar, pero las elevadas peticiones del club italiano (se llegó a hablar de 80 millones de euros) frenaron al equipo parisino.
A propósito de ello, Galtier reconoció en rueda de prensa previo al partido de este miércoles que la baja del defensa francés es importante, ya que no tiene recambios contrastados a los tres centrales de primera línea con los que juega (Ramos, Marquinhos y Kimpembe).
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