El Real Madrid vs. PSG, por la vuelta de los octavos de final de la Champions League, se presenta ante Cristiano Ronaldo como una oportunidad perfecta para demostrar que es uno de los mejores jugadores del mundo.
El crack portugués llega a este encuentro como el máximo goleador de la Copa de Europa, aunque también con las revoluciones a mil por hora. No lo decimos por su ansias de anotar, más bien porque quiso agredir a un rival.
Cuando se jugaban los 17 minutos del partido, Cristiano Ronaldo intentó a agredir a Dani Alves con una patada por detrás. Para fortuna del brasileño, este ya estaba metros adelante y se salvó de la furia del goleador del Real Madrid.
Aunque las intenciones de agredir al lateral derecho del PSG fueron claras, Cristiano Ronaldo ni siquiera se llevó la tarjeta amarilla del árbitro del partido de los octavos de final de la Champions League en París.