Barcelona SC reveló este domingo que ejercerá todas las acciones legales en su poder tras la ratificación de la Cámara de Apelaciones de CONMEBOL, al castigo impuesto al club por sacar al terreno a un jugador con una inscripción a destiempo en la segunda fase de la Libertadores.
"Barcelona Sporting Club (BSC) ejercerá todas las acciones legales necesarias a fin de que se reconozcan los perjuicios causados al club", señala la directiva en un comunicado.
El club guayaquileño alineó al centrocampista colombiano Sebastián Pérez en el partido que ganó por 1-2 en la ida contra el uruguayo Defensor Sporting, que de inmediato presentó la apelación ante la Conmebol, que aplicó el reglamento para este tipo de casos devolviéndole los puntos con un resultado final de 3-0.
El presidente del Barcelona, José Francisco Cevallos, aseguró que ante la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) ha presentado la documentación en el tiempo reglamentario.
Por su parte, el presidente de la FEF, Francisco Egas, reconoció que uno de sus funcionarios fue el que cometió dicho error que ocasionó la penalización al Barcelona.
El conjunto ecuatoriano ganó también el partido de vuelta por 1-0, pero no alcanzó a remontar ese 3-0 impuesto por el reglamento del ente disciplinario de la Conmebol.
"Finalmente hemos sido notificados con el fallo dictado por parte de la Cámara de Apelaciones de la Conmebol, en la cual niegan el recurso de apelación presentado por BSC, contra la decisión dictada por la Unidad de Disciplina de la Conmebol en fecha 11 de febrero de 2019", añade el comunicado.
El equipo dirigido por el uruguayo Guillermo Almada esperaba que el veredicto de la CONMEBOL le fuera favorable para continuar en la disputa del torneo sudamericano.
El viernes directivos del club acompañados por el presidente de la FEF viajaron a Paraguay, donde se dirimió la penalización, después de que el miércoles se presentara la apelación al fallo del Tribunal de Disciplina de la Conmebol.
Esta semana el presidente de la Conmebol, Alejandro Domínguez, defendió la independencia de los órganos decisorios de la entidad que dirige.