Gonzalo Martínez estuvo muy cerca de anotar el primer gol en la final Boca Juniors vs. River Plate por la final de la Copa Libertadores. El argentino, sobre los cinco minutos del primer tiempo, obligó a responder al arquero Agustín Rossi.
El superclásico argentino entre Boca Juniors y River Plate, inédita final de la codiciada Copa Libertadores, se juega este domingo, un día después de lo previsto, tras la suspensión por la lluvia que alargó el suspenso y la ansiedad de millones de fanáticos.
La incertidumbre debido al mal tiempo en Buenos Aires se prolongó hasta la mañana del domingo, cuando una inspección de los veedores de la Conmebol determinó que el campo de juego está en condiciones para jugarse, informó la máxima autoridad del fútbol sudamericano en su cuenta en Twitter.
La Conmebol se vio obligada a suspender el partido el sábado, luego de que los 124 milímetros de agua caídos en toda la jornada, más de lo esperable para todo noviembre, anegaron el césped de la cancha en la Bombonera, el mítico estadio de Boca Juniors, donde se disputa la ida de la histórica final.
Con información de AFP