El 12 de enero de 2019, Yeferson Soteldo fue anunciado como flamante refuerzo de Santos de Brasil que, en ese entonces, tenía a Christian Cueva como su principal carta ofensiva para tomar el lugar de ‘10′ dentro de la escuadra brasileña.
La temporada era muy larga, por lo que se decidió tener un recambio para ‘Aladino’, quien luego se iría por la puerta de atrás del ‘Peixe’, dejándole una oportunidad enorme al mediocampista venezolano, quien no desentonó, y se quedó con la ’10′ de Pelé en el equipo brasileño.
Su talento llenó los ojos del comando técnico de Santos, donde decidieron darle más oportunidades, las mismas que pagó con creces con grandes actuaciones sobre el gramado de juego.
Este sábado, Yeferson Soteldo disputará la gran final de la Copa Libertadores ante Palmeiras. Lejos de huirle al reto, el jugador espera convertirse en el segundo jugador de la escuadra vinotinto en alzar el trofeo de clubes más importante del continente, tras Alejandro Guerra, quien lo hizo con Atlético Nacional en 2016.
“Esta final va a ser algo muy especial para mí, para mi familia, pero principalmente para Venezuela porque siempre están ahí, apoyándome y cuando más lo necesito. Muchas personas me apoyan y este ser un regalo que le puedo dar a mi pueblo que tanto lo necesita”, señaló el jugador de Santos, antes del duelo con Palmeiras, en diálogo con CONMEBOL Libertadores.
No es un secreto que Yeferson Soteldo es uno de los jugadores más pequeños del medio. Su casi 1.60 m. de estatura hizo que reciba muchas críticas al inicio de su carrera, las mismas que no destruyeron su sueño, pero si sus ganas de demostrarle al mundo entero que estaba equivocado.
“Pasé por muchas cosas porque todo el mundo hablaba de mi talla y decían que no iba a poder ser futbolista por mi tamaño. Ahora estoy aquí porque me superé y esto es un ejemplo para los más jóvenes, quienes pueden ver dónde está Soteldo y decirse que ellos también pueden”, agregó.
En este camino, el ‘10′ de Santos reconoció haberse inspirado en Lionel Messi, quien fue su principal referente para entender que el talento no necesariamente se mide de los pies a la cabeza.
“Yo hice eso con Messi. Vi que era pequeño y que llegó. Entonces me dije que yo también podía y es el recuerdo que más me marcó de niño”, finalizó el jugador venezolano.
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