Un gol al contragolpe de Kevin Gameiro en el minuto 66 rompió el plan defensivo del Athletic Club y dirigió al Atlético de Madrid hacia un triunfo insistente e indispensable, completado luego con el 2-0 de Diego Costa, para seguir la estela del liderato de la Liga del Barcelona, a siete puntos de distancia.
El pase del 2-0 también correspondió al atacante francés, la solución desde el banquillo de un partido áspero para el conjunto madrileño, atascado cuando el encuentro le requirió posesiones largas frente al repliegue de su oponente y eficaz cuando el equipo bilbaíno permitió su contraataque: las dos primeras, dos goles.
Porque el Atlético se encontró ante un partido más que habitual en los últimos tiempos en su estadio. El Athletic Club le entregó la pelota sin matices, como suelen hacer últimamente sus oponentes y como también, salvo unas cuantas excepciones, suele tener más dificultades para profundizar entre la estructura defensiva rival.
No es nada nuevo ya para el conjunto madrileño, que necesita el vértigo, el pensamiento rápido y el espacio para correr, para desbordar más y mejor a sus contrincantes. El Atlético es menos Atlético sin contragolpe y sin velocidad, también, en su defecto, cuando no encuentra entre líneas el fútbol de Antoine Griezmann.
Más aún cuando su oponente tiene tan claro lo que quiere del encuentro, como el Athletic Club, medido al milímetro tácticamente, ajustado al detalle, indudablemente más preparado en el Wanda Metropolitano para limitar daños en su portería -no hubo una sola parada de Kepa en el primer tiempo- que para provocarlos en la otra.
Sin Aritz Aduriz ni Raúl García, con Iñaki Williams como único hombre en punta, con el centro del campo bien armado, alertado por las cinco jornadas consecutivas sin ganar y por las cualidades del Atlético, entendió que su partido estaba ahí, en un duelo largo, con un ritmo cansino, tremendamente cuidadoso con las virtudes locales.
Atrincherado por momentos, sostenido por ese rigor para saber cuándo y cómo debía replegarse o cómo y cuándo debía evitar la superioridad por las bandas, sin más proposición ofensiva que tener la pelota porque le tocaba en ese momento, más que para crear algo inquietante para el hoy casi siempre 'espectador' Jan Oblak, el Athletic contuvo todo el primer tiempo la insistencia del Atlético.
Entre otros asuntos porque al conjunto madrileño le faltó más precisión de tres cuartos para adelante, donde se resuelven los ataques, porque el árbitro González González no observó penalti en el minuto 18 en la maniobra dentro del área de Diego Costa, derribado por Unai Núñez, y porque Giménez envió fuera una ocasión.
Nada más en 51 minutos. Ni tampoco nada ofensivamente del Athletic: apenas un amago de remate de Iñaki Williams, al que se interpuso oportuno Lucas Hernández, de nuevo imponente y titular, como los doce encuentros de 2018. En esa jugada se lesionó, aguantó hasta el descanso y fue reemplazado entonces por Diego Godín.
La primera parada de Kepa Arrizabalaga llegó ya con la segunda parte en juego, con una volea de Diego Costa que atrapó sin excesivos apuros el guardameta; al menos algo en una ofensiva a ratos desordenada, intermitente, que tropezó a menudo con el muro que había edificado el Athletic en su campo e irrompible...
Hasta el minuto 66. Una de las mínimas oportunidades que concedió el equipo bilbaíno para el contraataque del Atlético. Pero ahí no perdona el bloque local: un robo de balón en el medio campo de Saúl Ñíguez, que conectó con Griezmann -aplaudido por el público-, éste con Gameiro y éste con el gol, con un certero tiro cruzado. El 1-0.
¿Tenía plan para remontar el Athletic, tan ajustado para defender todo el encuentro? No. Ni con el 0-0, cuya mejor opción fue un doble regate de Jan Oblak que solventó con inesperada agilidad, ni con el 1-0, sin un solo acercamiento, ni menos con el 2-0 de Diego Costa, que aprovechó el servicio de Gameiro para sentenciar el triunfo del Atlético, que insiste en la Liga, a siete puntos del Barcelona. EFE
Atlético de Madrid vs. Athletic Bilbao: así jugaron.
Atlético de Madrid: Oblak; Vrsaljko, Giménez, Lucas, Filipe Luis; Thomas, Saúl, Koke, Correa, Griezmann, Costa.
Athletic Bilbao: Kepa; Lekue, Núñez, Martínez, Saborit; Vesga, San José, Susaeta, Beñat, Sabin, Williams
LA PREVIA DEL PARTIDO.
Antoine Griezmann, determinante casi siempre ante este oponente, se reencuentra ahora con el Athletic Club, además en un momento espectacular, de nuevo como un líder incontestable de Atlético de Madrid, con cinco goles en los últimos seis choques oficiales, con su irrenunciable esfuerzo defensivo y con todas las cualidades técnicas de un futbolista de enorme talento.
A su lado se prevé a Diego Costa. Ya recuperado de las molestias musculares que le apartaron del partido del jueves en la Liga Europa en Copenhague, se ha entrenado con el grupo en las dos últimas sesiones y apunta a la alineación frente al Athletic Club, en la que también estará Jan Oblak, ya repuesto de un proceso gripal.
En la alineación probable del Atlético de Madrid, impulsado por nueve victorias en las últimas once jornadas en su persecución del liderato del Barcelona, a siete puntos después de reducir cuatro en los dos encuentros más recientes, e invicto aún en el campeonato en el estadio Wanda Metropolitano, con siete triunfos y cuatro empates.
En ese campo se estrena este domingo el Athletic Club con una racha opuesta en la Liga Santander. No ha ganado ninguno de sus últimos cinco encuentros en esa competición, aunque, a la vez, sólo ha perdido uno de sus doce duelos más recientes en este torneo y resurgió este jueves con una victoria rotunda frente al Spartak de Moscú (1-3).
Aunque en el Wanda no estará Aduriz ni tampoco Raúl García, ambos baja por sanción, por lo que el reto de competir ante el segundo clasificado de Liga Santander se presenta más que complicado en un curso en el que el conjunto bilbaíno no está para demasiados alardes.
Atlético de Madrid vs. Athltic Club: alineaciones confirmadas
Atlético de Madrid: Oblak; Vrsaljko, Giménez, Godín, Filipe; Correa, Saúl, Koke, Carrasco o Gabi; Griezmann y Diego Costa.
Athletic Club: Kepa; Lekue, Yeray, Iñigo Martínez, Saborit; Iturraspe, Mikel Rico; Susaeta, De Marcos, Sabin Merino; y Williams.