Barcelona desea más que nadie en Europa a Paulinho. Pese a su irregular pasado en el Tottenham, Ernesto Valverde considera que con grandes socios en el equipo, el brasileño puede ser ese mediocampista de nivel que se ha visto con Tité en el ‘Scratch’. Para ello, el ex entrenador del Athletic Bilbao ha pedido a la dirigencia culé que se agoten todas las posibilidades para que se incorpore al jugador que pertenece al Guanzhou de China.
La situación es complicada. El club chino se había visto molesto por la forma en cómo empezaron las negociaciones a lo que el entrenador Luiz Felipe Scolari simplemente remitió a la cláusula de rescisión: 40 millones de euros. El Barza no pretende pagar esa suma y había presentado este lunes la última oferta por Paulinho: 30 millones más objetivos.
En el club catalán son conscientes de las cualidades, pero consideran que su precio es elevado tratándose de un futbolista que juega en la Superliga China más por dinero que por objetivos futbolísticos. Por ello, la oferta presentada llegaría a los 40 millones, siempre y cuando el brasileño cumpla con una cierta clase de objetivos en la próxima temporada.
¿Aceptará el Guanzhou? De lo que sí está convencido el Barza es de la seriedad de la nueva oferta presentada al Guanzhou, con la que se pretende, también, obtener una especie de perdón del presidente del conjunto chino, Xu Jiayin, al parecer molesto por las formas del Barça en su primer intento para fichar al exCorinthians. En este caso, el paso realizado respondería, en la forma y el fondo, de la seriedad del conjunto catalán, así como su interés por Paulinho.
El Barza no espera a que culmine el mercado de pases (31 de agosto) por hacerse de un jugador de calidad que necesita la volante. André Gomes y otros no han cumplido con los requisitos que se necesitan para ser un indiscutible en el equipo titular blaugrana.