El mercado de fichajes suele ser un centenar de idas y vueltas para todos los equipos. Rumores de llegadas y salidas van a la orden del día. El factor económico también juega un papel clave en este proceso porque la idea de cambiar de equipo, para muchos jugadores, significa revalorizarse. Con miras a la temporada 2022-2023, Barcelona y Chelsea han protagonizado una constante pelea por ciertos nombres y esto puede repercutir en dos posibles objetivos del equipo español que son parte de los ‘blues’.
Al inicio de este proceso previo a la temporada 2022/2023, Barcelona contaba con serios problemas económicos que no le permitían realizar fichajes de gran magnitud. Este factor fue cambiando con el paso de los días y ciertos movimientos a nivel dirigencial facilitaron la apertura de dinero para que el cuadro ‘culé' comenzara a buscar nuevos nombres en el mercado de Europa.
Si hablamos de interés común, Barcelona tuvo una amplia coincidencia con Chelsea para esta temporada. Sin embargo, los azulgranas han sido los más beneficiados y quienes mejor han sabido mover sus fichas para hacerse de figuras generando un balance en el plantel que promete sorpresas para esta temporada.
Jules Koundé es el último deseo mutuo que terminó quedándose en España y ya es nuevo jugador de los dirigidos por Xavi Hernández. Luego de una larga espera y disputa, se pudo concretar un acuerdo con un monto que todavía no ha sido revelado. Sevilla cerró el acuerdo con Barcelona cuando todo parecía estar cerrado para Chelsea que ha visto la fuga de defensores centrales con la ida de Rüdiger (a Real Madrid) y Christensen que también se decantó por no renovar e ir a España.
Andreas Christensen fue uno de los primeros movimientos a favor del equipo. Tras terminar contrato, decidió no renovar con Chelsea y arribo a tienda culé. El defensa central apunta a ser uno de los titulares en la zaga aunque tendrá que pelear con nombres como Eric García, Araujo, Piqué y ahora Koundé.
Raphinha se mostraba como uno de los objetivos a nivel ofensivo para Chelsea. Aunque Arsenal también estuvo en la pelea, Barcelona aprovechó el interés del jugador por vestir esta camiseta para mantenerlo en espera y, ni bien se activó la ‘palanca’ lanzar la oferta para concretar su llegada.
Quizás más lejano, pero cuando Robert Lewandowski expresó su deseo por salir de Bayern Múnich levantó el interés de grandes equipos de Europa. Chelsea fue uno de ellos, pero Barcelona ya lo tenía fijado como objetivo. El polaco también fue paciente y hasta se mudó a España para sus vacaciones como una señal que su destino estaba fijado.
Era claro el afán de Barcelona por reforzar la zaga central. La llegada de Christensen y Koundé evidencia que los problemas en defensa tenían que ser solucionados. El equipo ‘culé' parecía tener todo arreglado con Kalidou Koulibaly que iba a salir de Napoli. Sin embargo, fueron los problemas económicos los que lo llevaron a aceptar la oferta de Chelsea. El cuadro inglés se quedó con el jugador, pero este ha sido su único refuerzo para el sector.
Chelsea posee dos jugadores que ya han manifestado la intención de irse, pero aún mantienen contrato. Barcelona se encuentra tras los pasos de César Azpilicueta y Marcos Alonso con el fin de reforzar las bandas. La ‘venganza’ de los ‘blues’ sería la puesta de trabas para dejarlos salir y esto se ve evidenciado en la demora del proceso. El cuadro dirigido por Thomas Tuchel no ve bien seguir debilitando su plantel y mucho más cuando no ha arrancado la pretemporada de la mejor manera.
Recibe nuestro boletín de noticias: te enviaremos el mejor contenido deportivo, como siempre lo hace Depor.
Contenido GEC