Barcelona expresó su rechazo a una orden policial que prohíbe que sus aficionados lleven banderas nacionalistas catalanas a la final de la Copa del Rey, que disputará este domingo en la ciudad de Madrid contra Sevilla.
La policía local dijo que la estelada, bandera que refleja el sentimiento independentista catalán, no sería permitida en el estadio Vicente Calderón. Esto en cumplimiento de la ley contra el racismo, la violencia, la xenofobia y la intolerancia en el deporte.
"El club Barcelona expresa su desacuerdo más absoluto con el anuncio de prohibir la exhibición de banderas esteladas en la final de la Copa del Rey, que se jugará el próximo domingo ante Sevilla", dijo el club en un comunicado a través de su página web. "Se considera que esta decisión es un atentado a la libertad de expresión, un derecho fundamental de todo individuo a expresar ideas y opiniones libremente", agregó.
El club azugrana fue multado con 33 mil 695 dólares en julio de 2015 después de que algunos de sus aficionados ondearan esteladas durante un partido de la Liga de Campeones contra Bayer Leverkusen. "Este club ha defendido y seguirá defendiendo la libertad de sus socios y aficionados, que han demostrado siempre un alto nivel de civismo y respeto", agregó.
El presidente de la gobierno catalán, Carles Puigdemont, y la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, han anunciado que no asistirán a la final en protesta por la prohibición. "No puedo asistir como invitado a un acto en el que se prohíbe a mis conciudadanos poder exhibir un símbolo que expresa un deseo de libertad", dijo Puigdemont en Twitter.
La final de la Copa del Rey fue objeto de gran polémica el año pasado cuando aficionados del Barcelona y del Athletic Bilbao silbaron sonoramente el himno nacional antes del inicio del partido en presencia del rey Felipe VI.
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