Este martes, la Audiencia Provincial de Barcelona envió a juicio a Dani Alves, exjugador del FC Barcelona y la Selección de Brasil, quien es acusado de un delito de agresión sexual a una joven en una discoteca de la Ciudad Condal en diciembre del 2022. El tribunal confirmó el procesamiento del exfutbolista tras concluir que tanto las declaraciones de la víctima y los testigos, como las pruebas periciales, sustentan suficientes indicios para enviarlo a juicio por el delito que se le imputa.
Según los medios españoles, desde hoy se abre un plazo de cinco días para que la Fiscalía y la acusación particular presenten sus escritos, en los que detallarán sobre su petición de condena para el exlateral de la Juventus. Eso sí, la Audiencia de Barcelona todavía no ha puesto una fecha exacta para la realización del juicio, que se informará en los próximos días.
Tras la petición de nulidad de la defensa del deportista, por filtraciones en el caso, los magistrados del tribunal señalaron que las causas que afectan a “personajes públicos” tienen una “indudable repercusión mediática” y que en los medios de comunicación se pueden realizar opiniones que atenten contra la presunción de inocencia “en su vertiente extraprocesal”, y concluyeron que ello no afecta al proceso judicial.
Cabe recordar que, la estrategia de defensa principal de Alves consiste en reconocer que sí existieron relaciones sexuales con la víctima, pero que siempre fueron consentidas. Se trata de la última carta que le queda al brasileño, después de que incluso su exmujer, Dinora Santana, y sus dos hijos le hayan dado la espalda en los últimos días.
Dani Alves está en prisión provisional desde enero
El exdefensa de la ‘Canarinha’ se encuentra en prisión provisional desde el pasado 20 de enero. Desde esa fecha, su defensa ha pedido en reiteradas ocasiones que pueda salir en libertad, algo que la Audiencia de Barcelona ha desestimado. En junio, los jueces apuntaron que ninguna de las alternativas que había impulsado el equipo legal del exjugador servían para dejarlo en libertad.
Según el autor que lo mantuvo en prisión en los últimos meses, los indicios recopilados en la investigación, por los Mossos d’Esquadra, en especial las huellas halladas en el lugar de los hechos (los lavabos de la zona VIP de la discoteca Sutton), “no solo no desvirtúan, sino que confirman” la acusación de la víctima.
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