Su debut no pudo ser mejor. El Barcelona goleó 5-0 al Espanyol y el último tanto fue de Luis Suárez, quien había buscado su tanto todo el partido; y éste llegó nada menos que gracias a Ousmane Dembélé, quien jugó sus primeros minutos con camiseta azulgrana.
Cuando ya el partido llegaba a su fin, una gran contra liderada por Paulinho, ingresado en la segunda mitad, posibilitó que el francés gane la línea de fondo y con un solo toque de derecha, dejó solo a Suárez. El uruguayo lo definió de izquierda y de inmediato buscó a su nuevo 'cómplice' en el ataque para celebrarlo.
Dembélé debutó de forma oficial, ingresando a los 67 minutos en reemplazo de Deulofeu, en medio de una gran ovación del Camp Nou, que tiene muchas expectativas en su nueva 'joya'.
Messi abrió el marcador con un disparo tras dos recortes en el área (26), antes de rematar un centro de Jordi Alba desde la izquierda para hacer el 2-0 (35) y hacer el 3-0 al rematar un pase desde el punto de penal (66).
Gerard Piqué con un remate de cabeza hizo el 4-0 (87) y Luis Suárez remachó el 5-0 al rematar un pase desde la derecha de Ousmane Dembélé (89).
El Barcelona impuso su juego ante un Espanyol muy defensivo, que esperaba atrás para intentar salir al contraataque y que tuvo su mejor ocasión en un disparo al palo del argentino Pablo Piatti (43).
La victoria permite al Barça ponerse líder con dos puntos de ventaja sobre el segundo, el Sevilla, que este sábado ganó 3-0 al Eibar.
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