El primero fue Gerard Piqué y se pudo inscribir a jugadores como Èric García y Memphis Depay. Ahora, es el turno de Jordi Alba, quien se rebajará el sueldo la semana que viene como parte de las negociaciones del FC Barcelona con los jugadores que tienen las fichas más altas del plantel, comenzando con los capitanes del club tras la salida de Lionel Messi.
Y es que parte de la situación actual del club -deuda de 1.350 millones de euros- es por las altas fichas con las que cuenta la plantilla culé, sobre todo, durante la gestión de Bartomeu, pero que ahora se quiere reacomodar con los reajustes salariales.
La llegada de Laporta a la gestión del Barcelona tuvo como finalidad, entre otras cosas, buscar disminuir la masa salarial. Hoy en día, esta operación es vital para inscribir a la plantilla completa -falta el ‘Kun Agüero- y poder gestionar mejor los ingresos y egresos del club blaugrana de cara al futuro.
En este camino, el club y el lateral zurdo están a punto de cerrar un trato para disminuir su sueldo, uno que LaLiga acepte, y que podría concretarse en los primeros días de la próxima semana, según comenta el Diario Sport.
De hecho, las conversaciones entre el jugador y el club se intensificaron en los últimos días, sobre todo, tras la rebaja de Piqué, uno de los capitanes del club con la salida de Messi. Pero eso no sería todo, los otros dos capitanes culés, Sergio Busquets y Sergi Roberto, también llegarían a un acuerdo en los próximos días para seguir el camino trazado por el exdefensor del United.
Con alrededor de 10.500 espectadores en las gradas del San Mamés, el Barcelona visitará ‘La Catedral’ para afrontar el duelo por la segunda fecha de LaLiga Santander. Koeman ya adelantó que le dará unas merecidas vacaciones a Pedri luego del partido. Depay y Griezmann son las principales opciones de gol para hacer olvidar a Messi.
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