Primero Dembélé y luego Coutinho. Los 222 millones de euros ganados por el pase de Neymar al PSG permiten al Barcelona negociar por otros dos jugadores para la próxima temporada. Aún queda tiempo para qué cierre el mercado de pases (31 de agosto) y el Barza no pierde las esperanzas por llenar un hueco que fue dejado por el brasileño. Por ello, como publican medios españoles este martes, los dirigentes catalanes viajaron a Alemania para tratar de cerrar el acuerdo por Ousmané Dembélé, uno de los objetivos para el puesto de extremo.
Javier Bordas y los ejecutivos Raúl Sanllehí y Óscar Grau han llegado a Dortmund para negociar el monto del traspaso del delantero francés. El cuadro teutón pide 100 millones de euros, a lo que el Barza pretender ofrecer ese momento si es que él jugador termina cumpliendo una serie de objetivos, que se irían pagando de acuerdo a montos en variables.
Posteriormente al viaje de Alemania, los mismos directivos pretender centrarse en la ficha de Philippe Coutinho, con quien ya tienen un acuerdo y esperan que el Liverpool termina cerrando la propuesta culé, que también estaría cerca de los 100 millones de euros.
Por otro lado, el Barcelona se midió el pasado lunes al Chapecoense en el Trofeo Joan Gamper para homenajear a las víctimas y supervivientes del accidente aéreo en el que perdieron la vida 71 personas en noviembre de 2016, cuando el club brasileño viajaba a Colombia para disputar la final de la Copa Sudamericana.
Antes del partido, que terminó con victoria local por 5-0 con goles de Gerard Deulofeu (min. 6), Busquets (11), Messi (28), Luis Suárez (54) y Denis Suárez (75), el capitán del equipo, Andrés Iniesta, pronunció un pequeño discurso con el que dio la bienvenida a la nueva temporada y, sobre todo, honró al equipo de Chapecó.
"Hoy es un día muy especial, recibimos en nuestra casa al Chapecoense, un rival muy especial. Espero que podáis disfrutar de un partido inolvidable", dijo el manchego, que quiso acordarse tanto de las víctimas como de sus familiares y de los supervivientes.