La arenga para que la Selección de Argentina clasifique de forma directa a Rusia 2018 llega también desde el Barcelona. El club azulgrana hace fuerza para que Lionel Messi y Javier Mascherano eviten el repechaje ante Nueva Zelanda y se puedan ahorrar varias horas y kilómetros de viaje en dos semanas, entre Atenas, Nueva Zelanda y Buenos Aires.
Por la Champions
El 31 de octubre, el Barcelona visita Atenas para medirse al Olympiacos por la fecha 4 del grupo D de la Champions League, en un duelo en el que está por descontada la presencia de Messi y Mascherano. Tras esa primera parada, los culés regresan a casa para preparar el duelo ante el Sevilla por la Liga Santander. Y aquí salta la primera gran interrogante: ¿jugarán los argentinos?
Peligra el Sevilla
En caso los albicelestes jueguen la repesca, tendrán que viajar hasta Wellington (Nueva Zelanda) para jugar el 8 de noviembre el partido de ida; lo cual supondría que los seleccionados argentinos no disputen el partido ante Sevilla en el Camp Nou, el 4 ó 5 de noviembre, debido, desde luego, a la cercanía de los encuentros.
Aun así, todo dependerá de la negociación y de lo que arreglen los jugadores, el club y la AFA.
De vuelta a Argentina
En lo que no cabría negociación es que tanto la 'Pulga' como el 'Jefecito' tendrían que retornar a Buenos Aires para, el 15 de noviembre, jugar el partido decisivo frente a Nueva Zelanda, y sea cual sea el resultado, poner marcha rumbo a Barcelona, otra vez.
Es decir, en un hipotético quinto lugar del combinado de Sampaoli, Messi y Mascherano viajarían hasta Nueva Zelanda, a España, posteriormente a Argentina y luego, otra vez a Barcelona. Y antes, estarán sí o sí en Atenas. Una vuelta al mundo entre el 31 de octubre y el 15 de noviembre. Maratónico.
Así que en tienda culé, hacen fuerza para que Argentina pueda conseguir un resultado favorable este martes 10 de octubre en Quito ante Ecuador, que los clasifique de manera directa al Mundial, evitar el repechaje y, sobre todo, las larga travesía en un avión.