En el fútbol hay partidos que nunca se olvidan. Los hinchas de Boca Juniors, por ejemplo, todavía tienen el recuerdo fresco de la victoria sobre Real Madrid en la Copa Intercontinental del 2000 en Japón. A pesar del doblete de Martín Palermo en el 2-1 final, los fanáticos hablan más del partidazo que jugó Juan Román Riquelme.
El ‘Topo Gigio’, en el mejor momento de la trayectoria, se encargó de brindar el equilibrio al conjunto Xeneize frente a un conjunto que tenía estrellas de la talla de Luis Figo, Raúl González Blancos, Fernando Hierro, Claude Makelele o Roberto Carlos, este último autor del descuento para los españoles.
A dos décadas de aquella exhibición del ‘10′, uno de los protagonistas de aquella jornada habló de lo ocurrido en Tokio. Vicente del Bosque, por ese entonces entrenador de Real Madrid, manifestó que “Riquelme era un jugador que aglutinaba mucho el juego del equipo y que con su participación lideraba y marcaba el ritmo de Boca, en ese caso”.
En ese sentido, el campeón del mundo con la selección española en Sudáfrica 2010 aseguró que el mediocampista argentino, gracias a sus características dentro del campo, pudo haber tenido un papel importante si se animaba a fichar por la ‘Casa blanca’.
“Yo creo que él podría haber jugado en el Real Madrid, son hipótesis, yo creo que podría haber sido una estrella para nuestro club. Los que vienen al Madrid juegan bien y el que es bueno, termina triunfando”, declaró Del Bosque, hoy retirado de la actividad, en el programa La Secta Deportiva.
Finalmente, Riquelme eligió otros caminos. Después del título del 2000, el volante tardó un tiempo más para sumarse a Barcelona. Con los azulgranas nunca se consolidó y terminó en Villarreal, también de España, donde completó temporadas importantes. Con el ‘Submarino amarillo’ ganó dos veces la desaparecida Copa Intertoto y hasta peleó por una final de Champions League.
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