En 2012, en el penúltimo año de Jose Mourinho en el Real Madrid, el entrenador portugués se enfocó en la búsqueda de nuevos talentos para su equipo. El primer lugar que observó, como es lógico, fue la cantera madridista, donde por ese entonces destacaban jugadores como Jesé Rodríguez, Nacho, Cheryshev, Álvaro Morata y Cristian Benavente.
Los dos últimos futbolistas mencionados, según la prensa española, tenían grandes posibilidades de llegar al primer equipo ese año o al siguiente a más tardar. El hoy delantero del Chelsea y el peruano solían asistir a los entrenamientos con el primer equipo en cada fecha FIFA, por lo que el DT portugués no iba a demorar demasiado en decantarse por uno.
Finalmente fue Álvaro Morata que más gustó a Mourinho y terminó llevándoselo con el grupo de grandes estrellas del Real Madrid. El primer gran contrato que le hizo fue tan bueno que con solo 20 años le prometió que nunca más iba a tener la necesidad de volver a trabajar.
Cosas de las que se arrepiente
Así como Mourinho le dio a Morata el contrato de su vida, le hizo prometer un gran esfuerzo por centrarse en ser el mejor del equipo. Sin embargo, el delantero español no lo tomó con seriedad y es algo de lo que hoy se arrepiente.
"Mourinho era muy bueno con nosotros. Me dijo que me centrara y me pusiera a trabajar. Es de las únicas cosas que me arrepiento en mi vida, no haberme centrado desde el principio", aseguró el ex madridista en un adelanto de la entrevista que ofrecerá este lunes Movistar Plus.