El avión en el que el pasado lunes viajaba el futbolista argentino Emiliano Sala, en paradero desconocido desde entonces, tuvo problemas para despegar de Nantes con rumbo a Cardiff. Además, el piloto se negó a subir al vuelo al último momento.
Según revela este miércoles el diario 'Ouest France', Sala envió varios mensajes a su compañero del Nantes Nicolas Pallois, que le había llevado hasta el aeropuerto, en el que le indicó que el avión había intentado despegar "tres o cinco veces" antes de lograrlo.
El diario regional apunta que tres personas pasaron el control de embarque, pero que una de ellas, el experimentado piloto Dave Henderson, se quedó en tierra por motivos desconocidos hasta el momento.
Otro piloto, cuya identidad no ha trascendido, tomó los mandos del aparato y, siempre según el rotativo, pidió al control aéreo bajar de altura poco antes de que se perdiera la señal de radio, lo que puede indicar que encontró problemas con el hielo.
El avión, un monomotor de seis plazas, había despegado sobre las 20.15 horas local (19.15 GMT) del aeropuerto de Nantes y, tras una hora de vuelo, desapareció de los radares, cuando se encontraba sobre aguas de Guernesey, territorio bajo soberanía británica.
Las autoridades de esa isla lo buscan desde entonces aunque ya han asegurado que, dadas las bajas temperaturas del agua, hay pocas esperanzas de encontrar supervivientes.
Fuente: EFE