Imágenes que lo dicen todo y declaraciones que confirman la tensión. El diario L’Equipe publicó este jueves un informe en el que aseguran que la interna del PSG es un hervidero, pese al buen momento deportivo tanto en la Ligue 1 como en la Champions League. Todo originado por la lucha de egos entre Kylian Mbppé y Neymar. Y es que cuando se creía que las aguas se habían calmado, comentarios de ambos futbolistas durante la reciente fecha FIFA no han hecho más que avivar el fuego.
“Aquí tengo mucha más libertad”, fueron las declaraciones de ‘Kiki’ luego de brillar en el partido ante Austria por la UEFA Nations League. “Juego de forma diferente con Francia. Me piden que haga cosas diferentes aquí que en el PSG. El entrenador sabe que tenemos a Giroud como 9 que fija las defensas y yo puedo ir al espacio”, agregó para dejar claro que en el PSG no la pasa bien con el esquema de Galtier, donde debe compartir el ataque con ‘Ney’ y Lionel Messi.
Y mientras se abría ese frente de batalla con el entrenador del equipo parisino, el brasileño parecía ignorar por completo lo que haga o diga el galo. Consultado por su relación él, luego de la goleada de la ‘Verdeamarela’ sobre Ghana, simplemente respondió con un “¿Cómo está Kylian? No lo sé”, mientras levantaba los ojos con ironía y se marchaba rápidamente a la concentración.
Así las cosas, los periodistas d L’Equipe llegaron a la conclusión que el “equilibrio sigue siendo precario” y señalan que la relación pasó de “fría a polar”, luego del estallido por el penal que Neymar no le concedió a Mbappé a inicios de temporada.
“La relación entre la M y la N parece haber tomado un giro feroz esta temporada”, afirma dicho medio de comunicación para añadir que la joven estrella francesa está muy disgustada por “las libertadas que se atribuía el brasileño” dentro y fuera del campo de juego, cuando la dirigencia del club le había prometido a él todo el poder para firmar la extensión de su contrato.
Por ahora, Mbappé ya logró su primer objetivo: ser quien ejecute todas los remates de penal en el equipo. Sin embargo, pareciera no bastarle con ello. Mientras tanto, un Lionel Messi, enfocado más en conseguir su mejor nivel físico antes del Mundial, aparece como mediador entre ambos.
Y es que ya días atrás L’Equipe aseguró que el argentino ha sido una de las personas en hacer que sus dos compañeros limen asperezas, asegurando que Leo “trató de calmar los ánimos y acercar posiciones sin querer dar lecciones” .
Tal fue la situación que el ‘10′ de la Albiceleste se salió de la disputa por ser el ejecutante de los penales, convirtiéndose en la tercera alternativa, actitud que ha sido muy bien vista por la dirigencia de la entidad, que ya piensa en renovar su contrato.
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