Neymar se despide del PSG. Este es el rumor que suena en los últimos días. El brasileño junto a su padre se preparan para realizar un movimiento que pueda desligarlo totalmente del equipo parisino y uno de los pasos más importantes ya se realizó, conversar con los directivos.
El contrato de Neymar es hasta el 2022 y su progenitor-representante ya se sentó a conversar con Nasser Al Khelaifi, presidente del equipo, días atrás. El futbolista ha reconocido que se equivocó en fichar por un equipo de un campeonato menor al español como el francés.
El bajo nivel de Francia se suma a la mala relación con los argentinos del equipo (Di María, Pastore, Lo Celso) y el uruguayo Cavani; sin embargo, la última decisión no está en sus manos. Tamim bin Hamad Al-Thani, jeque de Qatar y verdadero dueño del club tiene la última palabra, el trabajo será convencerlo.
Real Madrid, con Florentino Pérez a la cabeza, es el equipo que quiere a Neymar. El presidente blanco sabe que para convencer al emir de Qatar, deberá pagar una cantidad inimaginable. El precio oscilaría entre los 260 millones hasta los 300, un aspecto sensible ahora que Cristiano negociará un aumento de sueldo a final de temporada.
Si el Madrid no quiere gastar en cifras astronómicas, deberá esperar hasta el verano del 2019 pagando los mismos 222 millones que Neymar depositó al PSG para desligarse del Barcelona. Es un compromiso que firmaron ambas partes pese a que en el fútbol francés no existen cláusulas de rescisión.