Mohamed Salah tomó la mejor decisión de su carrera tras aterrizar en Liverpool. El egipcio llegó por pedido expreso de Jurgen Klopp y no ha desentonado. A pesar las dudas por su estado físico, el jugador demostró que puede destacar en la Premier League. Sin embargo, no es su único logro.
Salah logró clasificar a la Selección de Egipto a la Copa del Mundo de Rusia 2018 luego de 28 largos años. Un tanto de penalti, en el minuto 95, anotado por el jugador del Liverpool permitió al combinado dirigido por el técnico argentino Héctor Cúper superar a su rival y lograr romper con la larga sequía mundialista.
El cuadro norteafricano regresó a un Mundial luego de no acudir a las citas de Estados Unidos 1994, Francia 1998, Corea y Japón 2002, Alemania 2006, Sudáfrica 2010 y Brasil 2014.
Estos grandes hechos hicieron del 2017 de Salah su mejor año futbolístico, siendo ganador del premio al mejor jugador africano del año, superando a Sadio Mané (Liverpool - Senegal) y a Pierre Emerick Aubameyand (Borussia Dortmund - Gabón)
"Siempre quise estar aquí", dijo Salah a los periodistas en una conferencia de prensa antes de la ceremonia.
"Me presiono y corro riesgos. Ahora mismo tengo la ambición de ser el mejor jugador egipcio de la historia".
El premio lo otorga la Confederación Africana de Fútbol desde 1992 y es considerado el premio más prestigioso para un jugador africano. Yaya Toure (Costa de Marfil) y Samuel Eto'o (Camerún) son los más ganadores con 4 distinciones cada uno. (D)