No guarda el mejor de los recuerdos. Antes de convertirse en uno de los hombres importantes de Guardiola en el Manchester City, Kevin De Bruyne tuvo su primera aventura en la Premier League en el Chelsea de Mourinho, con quien prácticamente no tuvo relación alguna. Así lo reveló el mediocampista belga en entrevista con la 'BBC'.
"Diría que era una relación distante. No soy una persona que hable mucho con los entrenadores. Pienso que es el entrenador el que, si quiere hablar contigo, lo hace. Él es el que manda. La relación puede ser buena, pero existe siempre una diferencia entre el jugador y el entrenador", explicó el jugador de 26 años.
"Sólo hablé con él dos veces. En una le dije que quería irme al Dortmund, al inicio del verano, y en la segunda le insistí que quería salir; era mejor para mí porque quería jugar al fútbol", añadió.
De Bruyne se quedó finalmente sólo una temporada, la 2013-14, jugó un total de 10 partidos, no marcó goles y registró una asistencia. Para el siguiente curso retornó a Alemania, para jugar en el Wolfsburgo, donde encontró continuidad, pudo despuntar y volver a Inglaterra por su revancha en el 2015 con el Manchester City.