Se acabó una época en el fútbol italiano. Esta mañana, la Juventus hizo oficial que Massimiliano Allegri dejará de ser el director técnico del club a fines de la presente temporada. El estratega parte de Turín habiendo gano todo, tanto con la Juventus como con el Milán.
Cuando uno habla de todo, no es una exageración. La ‘Vieja Señora’ ha dominado la Serie A con Allegri en el banquillo, ganando cinco ligas seguidas, cuatro copas locales y dos Supercopas. Aún así, el cuadro del norte de Italia no ha logrado dar el gran salto a nivel continental, pese a haber llegado a dos finales de Champions frente a –quizás– los dos clubes más grandes de Europa. Y, de paso, ante los dos mejores jugadores del siglo.
Primero, el Barcelona de Luis Enrique en 2015, con ese tridente ofensivo imparable de Neymar, Luis Suárez y Lionel Messi. Luego, en 2017, el Real Madrid de Zidane, un equipo que, con Cristiano Ronaldo a la cabeza, nunca se cansó de ganar.
Nombres como los mencionados terminaron desequilibrando las finales a favor de los clubes españoles, pero los equipos de Allegri, en ninguno de los dos encuentros, estuvieron a la altura.
Igual, si de resultados hablamos, lo de Allegri es más que valorable. El técnico, antes que todo, tiene la necesidad –obligación, para algunos de ganar–, y él lo ha hecho durante cinco temporadas seguidas. De repente su fútbol nunca fue el más vistoso, incluso teniendo grandes equipos (Buffon, Chiellini, Dani Alves, Arturo Vidal, Pirlo, Paul Pogba, Carlos Tevez, entre otros), pero el objetivo final fue logrado.
Teniendo en cuenta las situaciones por las que pasó la ‘Juve’ a mediados de los 2000, como la revocación del Scudetto de la temporada 2004/2005 y el descenso a la Serie B, lo que más necesitaban en Turín era derrocar a un poderísimo Inter de Milán y volver a los escenarios grandes de Europa. Allegri, con ayuda de Antonio Conte anteriormente, lo consiguió.
Pero, ¿qué pasó? ¿Por qué la Juventus no pudo dar para más? ¿Ha sido su culpa? La realidad es que, año tras año, los italianos fueron perdiendo figuras y el equipo, en lugar de debilitarse, fue creciendo. A pesar de eso, hacía falta una gran estrella –esa misma que les había ganado la Champions hace poco– para dar un salto aún mayor. Cristiano, este año, estaba encargado de eso. Y Allegri, de liderarlos hacia una ‘Orejona' que no logran desde 1996.
Quedar fuera en cuartos golpeó fuerte en Turín, especialmente al ser en casa y ante un Ajax joven y relativamente inexperto. Con ‘CR7’ en cancha y una inversión de millones de euros, la directiva de la ‘Vieja Señora’ ahora piensa en un ‘upgrade’ futbolístico, en alguien que complemente los resultados con una manera de jugar nunca antes vista en Italia. Por eso, quizás, tengan en mente a Mauricio Pochettino, actual DT del Tottenham, pero no es la única opción. El próximo entrenador seguramente llegará con una gran presión, pero también con la oportunidad de hacer historia.
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