Por sus hinchas, estadios, clubes, rivalidades: México es uno de los países más futboleros de esta parte del planeta. De hecho, en cada temporada de la Liga MX, vemos duelos emocionantes cada vez que se cruzan los clásicos rivales en una cancha de fútbol.
Por ejemplo, la rivalidad entre Chivas y América -el clásico mexicano- es conocida por ser el juego más importante del país, por ello es llamado como Clásico Nacional. O la rivalidad que tiene el ‘Rebaño’ contra el Atlas, ambos de Jalisco y protagonistas del Clásico Tapatío.
El cuadro de Coapa también tiene un eterno ‘enemigo’ futbolístico: Pumas. Temporada a temporada, incluso antes de la Liga MX, buscan ser el mejor en el Clásico Capitalino. Aunque las ‘Águilas’ tienen un choque especial con el Cruz Azul en el Clásico Joven. Y, por último, el norte de México se divide cuando Tigres y Monterrey se miden en el Clásico Regio.
¿Cómo se originó la rivalidad entre todos los clubes mencionados?
Unos pelearon por la hegemonía en el país, la misma ciudad o una sola región. Cada enfrentamiento tiene, además de deportivos, factores sociales, económicos que fueron alimentando la rivalidad a lo largo de los años.
También conocido como el clásico de clásicos. Según el diario ‘Récord’ de México, el primer partido entre Chivas y América se jugó el 10 de octubre de 1962. El juego fue suspendido a los 30 de la segunda mitad por falta de luz natural. Los azulcremas ganaban 1-0. Al día siguiente jugaron otra vez e igualaron 1-1. El 12 de octubre jugaron por tercera vez y, tras un arbitraje polémico –con abandono de las ‘Águilas’-, el ‘Rebaño venció 2-1.
A finales de los cincuentas, según FIFA, Chivas dominaba en México con un plantel con puros nacionales. Entonces, el dueño del América, Emilio Azcárraga, tuvo como objetivo ser el rival de los tapatíos. “Las Chivas son el bueno de la película, con sus jugadores mexicanos, nosotros vamos a comprar a los mejores extranjeros, y nos convertiremos en el villano”, declaró.
La rivalidad se gestó en las décadas del setenta y ochenta. Para ser más específico, el odio deportivo inició con una goleada de Cruz Azul 4-1 al América en 1972. Desde entonces, los azules se hicieron grandes porque eliminaron a los azulcremas en cuanto torneo se enfrentasen. Pero los ‘Águilas’ resurgieron en los ochentas para emparejar los resultados. Hoy la rivalidad continúa, con ligera ventaja para los del nido.
El 30 de agosto de 1964 jugaron por primera vez. La ‘Máquina’ recién había ascendido a Primera. Los ‘Águilas’, con más experiencia en esas lides, se quedó con la victoria por 2-1. Martín Ibarreche y Alfonso Portugal marcaron para los azulcremas y por los cementeros descontó Hilario Díaz.
Chivas aceptó jugar en el partido de fundación de un equipo de Jalisco: Atlas (1916). Ese duelo terminó sin goles y, quizás fue el más amistoso de todos. Porque al año siguiente empezó la rivalidad. Los ‘zorros’ vencieron 2-1 en el Torneo de Primavera, pero los ‘chivistas’ reclamaron por un mal arbitraje e incluso abandonaron el torneo. Finalmente se decidió que se jueguen tres partidos para conocer al mejor y los ‘rojinegros’ vencieron.
Desde entonces empezó la rivalidad. Más aún porque los ‘chivistas’ provenían de estratos sociales más acomodados y con mejores posibilidades económicas. Por su parte, los ‘zorros’ se caracterizaron por ser la institución que llega a los lugares más populares. Ese tiempo de diferencia hizo que la rivalidad crezca en la misma ciudad.
Dos de los tres clubes más importantes de México se enfrentan en el duelo que detiene a la capital del país azteca. América, el primero más importante, contra Pumas, el tercer más grande. El primer duelo entre ambos se jugó en 1962 cuando los universitarios debutaron en Primera frente a las ‘Águilas’. Moacyr dos Santos y Antonio Jasso marcaron los goles para los azulcremas.
Desde la primera vez que se enfrentaron, en 1960 (en Segunda División), ambos clubes estaban destinados a ser rivales toda la vida. En ese choque, Monterrey venció 2-0 a Tigres (poco antes llamado Jabatos de Nueva León), y aseguró su presencia en Primera. Aquella edición fue conocida como el Clásico 0.
Cuando los ‘felinos’ subieron a la máxima división, se midieron por primera vez el 13 de julio de 1974. El emocionante partido terminó 3-3. Juan Ugalde Pazos anotó el primero para Tigres a las 21’. Luego, Monterrey le dio la vuelta al partido con goles de Solís al 27' y 40' y de Jiménez al 48'. Para llegar al resultado final, anotaron por los universitarios Rodríguez al 63' y Menéndez al 83'.
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